Patrick Köbele ostenta la máxima
representación del PC Alemán tras el 20 Congreso de la organización,
celebrado la pasada primavera. Respondió a nuestras preguntas durante el
mes de diciembre, cuando todavía no se había cerrado el pacto entre la
CDU y el SPD para formar gobierno.
Unidad y Lucha: Camarada Patrick, hace unos
meses recuperasteis la dirección del DKP para las posiciones
revolucionarias, ¿puedes comentarnos cuáles son los ejes de vuestra
política tras el Congreso y cuáles son las principales diferencias con
el período anterior?
Patrick Köbele: En primer lugar, las decisiones
tomadas en el 20 Congreso no fueron decisiones tomadas únicamente por
algunos miembros del Partido o por “miembros muy importantes” de éste. A
la pregunta de un periodista sobre cuál era el estado de ánimo de la
mayoría de miembros de nuestro Partido que se expresaba con estas
decisiones, respondí: “Creo que la vasta mayoría de los miembros del DKP
están convencidos de que los acontecimientos que observamos a nivel
global, en Europa y también en Alemania, y que nosotros mismos
experimentamos, no exigen otra cosa que un Partido Comunista. Y estoy
seguro que esta mayoría también está de acuerdo sobre cómo entender
esto. Es el deseo de un Partido que analice el mundo con las ideas de
Marx, Engels y Lenin, y que considera su tarea fundamental hacer avanzar
a la clase obrera de clase en sí a clase para sí haciéndola ver que la
contradicción entre el capital y el trabajo asalariado está detrás de
las múltiples contradicciones individuales. Nuestros militantes quieren
un Partido que sea consciente de que esta contradicción sólo puede ser
superada por medio de la ruptura revolucionaria de las relaciones
imperantes de propiedad y en la sociedad, y que quiere transmitir este
conocimiento. Por último, se quiere un Partido que afirme que esta
ruptura requiere que la clase obrera, en alianza con otros, arranque el
poder de las manos de la burguesía, si se quiere construir el Socialismo
como alternativa al capitalismo. Todo esto hace necesario un Partido
Comunista que sea una organización autónoma, y la gran mayoría de los
miembros del DKP quieren que esto no sólo se confirme en la teoría, sino
que también quiere demostrarlo en las calles”.
UyL: Las recientes elecciones alemanas han
supuesto un gran apoyo para Angela Merkel. ¿Puedes comentarnos cómo
valoráis esta cuestión?
PK: La crisis económica y el papel del imperialismo
alemán requieren una consideración especial. El capital financiero de
Alemania – la fusión del capital bancario y el industrial – utilizó a
los gobiernos anteriores, tanto los de verdes y social-demócratas como
los de conservadores y liberales, para convertir a Alemania en un país
de salarios bajos en comparación con su extremadamente alta
productividad y bajar el salario real. Como resultado de eso, el
imperialismo alemán ha sido capaz de consolidar su hegemonía en Europa
incluso durante la crisis. Desarrolló una agresión económica mediante la
exportación que están sufriendo principalmente los llamados países
europeos periféricos. Para hacer esto se ha apoyado en su superioridad
financiera y tecnológica y su dominio dentro de la administración de la
UE.
Por lo tanto, una gran parte del capital alemán ha
pasado por la crisis prácticamente sin sufrir daños y por ello han
tenido éxito en mantener en una gran parte de la clase obrera las
ilusiones de un pacto entre trabajo y capital. Esto ha sido exacerbado
por las tendencias nacionalistas basadas en los cuentos sobre los
alemanes “diligentes” frente a los griegos, españoles e italianos
“vagos”, etc. El resultado de las últimas elecciones federales debe
analizarse en este contexto
Básicamente, el resultado expresa la conciencia
general – también entre la clase obrera – en nuestro país. Una gran
parte de la gente sigue una lógica localista y se identifica con “su”
empresa, “sus” jefes y “sus” superiores. Su eslogan es “mi compañía es
mi castillo”.
El especialmente radical pro-mercado Partido Liberal
Democrático (FDP) ya no tiene representación en el Parlamento. Sin
embargo, un nuevo partido de derechas – la “Alternativa para Alemania” –
ha ganado votos masivamente y por muy poco no llegaron a superar la
barrera para obtener representación parlamentaria. Es muy probable que
obtengan diputados en el Parlamento Europeo en 2014.
En esta situación, aparentemente habrá una gran
coalición entre social-demócratas y conservadores. Para la clase obrera
de nuestro país y también para los pueblos en Europa y del mundo, esto
no será un avance. Internacionalmente y a nivel de la UE, ambos partidos
están de acuerdo en las políticas que tratarán de fortificar y expandir
el imperialismo alemán y su hegemonía en términos políticos, económicos
y militares. Cualquier ilusión sería engañosa en este sentido.
La abstención del imperialismo alemán en la guerra
contra Libia – en la cual se ignoraron todas las leyes internacionales –
no expresó su deseo de paz. Era simplemente esperar que sus intereses
pudiesen plantearse con mayor efectividad de otra manera.
La oposición parlamentaria la forman ahora diputados
del Partido Verde y del Partido de la Izquierda. En la mayoría de los
distritos nosotros, el Partido Comunista Alemán, llamamos a votar por el
Partido de la Izquierda. No hicimos eso para que sustituyeran al
partido comunista, sino porque hay un acuerdo en cuanto a demandas
actuales y porque ellos tenían una oportunidad realista de entrar en el
parlamento.
En cuanto a su papel objetivo y su plataforma, el
Partido de la Izquierda es una fuerza social-demócrata de izquierda. Sin
embargo, debido a su origen histórico en el Partido Socialista
Unificado de Alemania, el SED, partido marxista-leninista gobernante en
la RDA, todavía hay un número de miembros que se consideran comunistas.
En ese partido hay una lucha permanente entre varias corrientes. Sin
embargo, esta lucha se da menos entre los comunistas y los llamados
“socialistas democráticos” que entre las fuerzas que pretenden la
coalición con verdes y socialdemócratas y los que se oponen a esas
coaliciones con mayor o menor fuerza.
UyL: En algunas circunscripciones pedisteis
el voto para Die Linke y en otras os presentasteis en solitario, ¿puedes
explicarnos esta postura?
PK: La decisión de cómo participaríamos en las
elecciones federales la tomó la antigua dirección del Partido. Entre el
Congreso y las elecciones federales hubo muy poco tiempo para debatir y
cambiar esta orientación. En mi opinión – en este caso tenemos
diferentes puntos de vista en el Partido – es que normalmente tenemos
que presentarnos a las elecciones, no especialmente para obtener escaños
en el Parlamento, sino para que llegue el Partido a las calles. En
nuestra opinión, el partido Die Linke es un partido socialdemócrata de
izquierdas. En algunas cuestiones de la lucha diaria tenemos posiciones
comunes. Otro aspecto es que no es fácil preparar la participación en
las elecciones federales en un partido pequeño como el nuestro.
Tendríamos que recoger en cada región de Alemania 2000 firmas de apoyo y
en algunas regiones no somos tan fuertes como para conseguirlas.
UyL: Creemos que existe un gran
desconocimiento sobre la situación de la clase obrera alemana. ¿Podrías
comentarnos a grandes rasgos cuál es la situación real de los
trabajadores y trabajadoras de tu país?
La clase obrera en Alemania está a menudo dividida.
Hay una parte de obreros en grandes sectores de la industria que están
trabajando directamente para compañías con contratos en condiciones
bastante buenas en comparación con otros sectores de la clase obrera.
Estos trabajadores controlan los debates en muchos sindicatos. Esta
parte de la clase obrera piensa menudo que tiene los mismos intereses
que la clase capitalista y que la política europea del imperialismo
alemán ayuda a que sus condiciones sean realmente buenas, especialmente
en comparación con la clase obrera de muchos países de la periferia
europea.
Otros sectores de la clase obrera, especialmente los
desempleados, pero también partes de la clase obrera en los grandes
sectores y en grandes compañías pero no en su nómina (que están
trabajando para otras empresas con malas condiciones o son
sub-contratados) son pobres o se ven en el camino de serlo. No obstante,
muchos de ellos no ven las razones del por qué de su situación en el
capitalismo, sino que ven la razón en su responsabilidad individual.
UyL: Un rasgo definitorio de la política de los partidos
comunistas europeos es su análisis de estructuras como la UE ¿Cuál es
vuestro análisis sobre la naturaleza de la Unión Europea?
PK: Desde nuestro punto de vista la UE es una
estructura de Estados imperialistas. Hoy está bajo la hegemonía del
imperialismo alemán y a veces del francés. Para el imperialismo alemán,
la UE es actualmente una estructura de mucha ayuda. En relación con la
alta productividad, los salarios en Alemania son muy bajos. Esta es la
base para una orientación de exportación donde especialmente ante la que
los países del sur de la UE no se pueden comparar. Así, el Euro es un
arma muy buena para el imperialismo alemán. Desde nuestro punto de
vista, todas las esperanzas de un renacimiento progresista de la UE son
ilusiones, ya que si las condiciones permitieran esto, éstas también
permitirían tener una victoria fundamental sobre el imperialismo alemán.
UyL: ¿Cómo analizáis la situación actual del Movimiento Comunista en Europa y en el mundo?
PK: El 15 Encuentro de Partidos Comunistas y Obreros
celebrado en Lisboa mostró que los partidos son capaces de definir
acciones y planes comunes para luchar contra la crisis capitalista y
contra el imperialismo. El Encuentro muestra también que la base del
análisis de la situación actual es mayoritariamente común. Y muestra que
tenemos un punto de vista ideológico común: el marxismo-leninismo. Por
otro lado, tenemos muchas cuestiones que debatir, pero no supone ningún
problema. Es una buena oportunidad y también un reto. Un problema que
encontramos y donde tenemos que encontrar una solución es que
necesitamos más espacio para los debates sobre estos temas.
UyL: ¿Hay algo más que quieras comentar para nuestros lectores?
PK: Sí, es muy importante para mí señalar que
entiendo y apoyo todas las opiniones y acciones contra el imperialismo
alemán. Sin embargo, no todos los alemanes son parte del imperialismo
alemán. Tenemos una clase obrera que no se ve a sí misma como clase y
con una gran falta de internacionalismo proletario. Pero ante todo es
clase obrera, así que pido a vuestros lectores que vean que
objetivamente la clase obrera en Alemania está al mismo lado de la
barricada de la lucha de clases que la clase obrera en España. Luchemos
juntos para que la clase obrera en nuestros respectivos países lo vea.
UyL: Muchas gracias, camarada.