Reflexiones del
sociólogo norteamericano James Petras (*) en su audición en español
semanal por CX36 Radio Centenario,
www.radio36.com.uy
Efrain Chury Iribarne: James Petras, buenos días, ¿cómo estás? Si
te parece empezamos por Paraguay. ¿Qué valor estratégico tiene este país
que se ha convertido ahora en satélite del Comando Sur de los Estados
Unidos?
JP: La presencia militar de los Estados Unidos es la primera
preocupación y Paraguay, por las fronteras que tiene con países de peso
en la región, es un enclave de interés. La geografía paraguaya
precisamente es un factor importante, frente a los gobiernos que
muestran un grado de independencia en su política externa.
Los ejercicios norteamericanos dentro de Paraguay son simplemente un
ensayo de preparación para ver si en el futuro podrían entrar en Bolivia
u otros países que limitan con Paraguay; ya que como fuerza militar
obviamente es muy insignificante. Pero las operaciones de inteligencia
norteamericanas en Paraguay son lo más extensivas a todo el continente y
no se si mucha gente sabe eso. Lo mismo con el espionaje que realizan
utilizando los últimos adelantos electrónicos, pues Paraguay es el
centro neurológico para estas operaciones.
Pero, en lo inmediato, no creo que vayan a tener un resultado
directo, sino que van a tener simplemente una ampliación de actividades
ahora con Franco y utilizarán eso para tratar de influir en los países
limítrofes. Es cierto que tienen contactos en todos los países,
obviamente con las cúpulas militares de Argentina, Brasil, etc. y eso es
igualmente importante, pero los ejercicios que se están haciendo ahora
en Paraguay son solo un esfuerzo para tratar de mejorar sus formas de
controlar la inteligencia en la región.
EChI: ¿En qué tema estás trabajando ahora?
JP: Bueno, hemos recibido varias llamadas desde Argentina sobre la
presentación del nuevo co-candidato de Mitt Romney, el diputado Paul
Ryan, que representa la extrema derecha y lo más neoliberal de todos los
candidatos presidenciales y vicepresidenciales.
Ryan quiere desmantelar todo el programa de Salud Pública que existe
en Estados Unidos, la salud pública que atiende a jubilados y
pensionistas. Además quiere privatizar la Seguridad Social; quiere
eliminar los programas de apoyo para asegurar los alimentos a los más
pobres; quiere bajar los impuestos a los grandes capitalistas; quiere
aumentar las tarifas para universidades y escuelas públicas.
En suma, es otra indicación de la derechización de la política
norteamericana. El hecho de que un fanático ultra reaccionario pueda
presentarse como candidato a la Vicepresidencia es algo insólito. No
habíamos visto un candidato tan extremista dentro de la política
derechista de los Estados Unidos.
Entonces, en esta elección tenemos un Presidente –hablo de Barack
Obama- que no ha tenido ninguna novedad en la política para bajar el
desempleo, porque ha multiplicado las guerras y sigue manteniendo las
políticas de la derecha. Y ahora tenemos un binomio –los candidatos
Romney-Ryan- que representan algo aun más extremista, que quieren
destruir -y no simplemente reducir- los programas sociales. Obama quiere
reducir los beneficios y aumentar el costo para la gente de los planes
sociales, pero este Ryan quiere directamente eliminarlos. Entonces, esto
deja a las grandes mayorías ante una situación muy difícil.
Por otro lado, la candidata del Partido Verde, Jill Stein, es una
alternativa progresista. Sin embargo, ahora ante la posibilidad de que
gane la ultraderecha, es muy posible que eso influya en muchos
progresistas a la hora de votar. Que apoyen la alternativa Verde pero
sientan miedo de que gane este fanático, entonces voten a Obama. Eso
está pasando ahora con muchos progresistas que prefieren votar a Obama y
si bien saben que no va a mejorar la situación, con eso –según ellos-
van a evitar la catástrofe para amplios sectores de la población. Pues
hay más de cien millones de norteamericanos afectados por los programas
que quiere eliminar Ryan. Esto es determinante.
Más allá de que Romney y Ryan hablan ya de empezar una guerra contra
Irán y proponen dejar de lado las sanciones. Israel está, ahora más que
nunca, preparando un ataque a Irán, anticipando que si se erige ganador
este binomio en las elecciones presidenciales en Estados Unidos, ellos
tendrán luz verde para lanzar un ataque destructivo en el Medio Oriente.
Esto lo plantean Benjamín Netanyahu y su ministro de Defensa, Ehud
Barak, pese a que muchos oficiales israelitas se oponen porque van a
tener repercusiones de misiles defensivos de Irán, del libanés Hezbolá y
desde otros países simpatizantes con Irán.
Por tanto, estamos en un momento muy complicado y muy difícil para las fuerzas progresistas aquí en Estados Unidos.
EChI: Se habla de que en setiembre podría darse el ataque sionista
y se ha dicho que Obama no ve con desagrado una guerra contra Irán.
JP: Es posible. Sería lo que llaman aquí la “sorpresa de octubre”,
puede que piense que puede beneficiarse de una guerra aérea contra Irán,
pero hay muchas incógnitas que debemos poner sobre la mesa.
Irán no va a quedarse simplemente tirando misiles y recibiendo
bombas. Tiene fronteras con Afganistán e Irak, tiene acceso a los países
del Golfo. Un ataque contra Irán podría afectar todo el Medio Oriente,
particularmente el flujo de petróleo de Qatar, Bahrein, Arabia Saudí.
Entonces no se en qué grado Washington está pensando que un ataque puede
limitar las consecuencias. En mi opinión es una política de altísimo
riesgo. Por el hecho de que la fuerza aérea israelí y la norteamericana
pueden destruir algún centro nuclear, pero no todos, y eso va a acelerar
la producción en materia nuclear y a la vez, extender el conflicto más
allá.
Y si la guerra se extiende a Afganistán, Irak, etc. las consecuencias
negativas podrían perjudicar a Obama en las elecciones. Por tanto, si
él piensa que una guerra exitosa podría ayudarlo en las elecciones está
equivocado, porque esto es muy riesgoso.
EChI: Hay versiones de que el terremoto que afectó a Irán en las últimas horas pudo ser provocado, ¿qué sabes sobre esto?
JP: No creo. El problema es que esta zona siempre tuvo terremotos, es
zona de alto riesgo. Hemos visto a lo largo de la historia varios
terremotos con resultados perjudiciales.
Lo que uno puede analizar es como mejorar la ayuda pública, la
intervención, la capacidad de intervenir para salvar vidas y ayudar a
los heridos y damnificados. En segundo lugar, es ver si deben cambiar la
ubicación de los pueblos allá y tratar de reubicarlos en zonas menos
riesgosas. Y por último, es ver si se podría construir viviendas con
mayor capacidad de resistencia; es algo que los ingenieros deben
evaluar, porque una de las principales razones por las que hay tantos
muertos es porque las viviendas no son resistentes y caen.
EChI: Paso a otro tema. El presidente egipcio ha hecho cambios que aparecen como profundos, en cuanto a lo militar.
JP: Si, son cambios en algún sentido progresistas, porque reemplazó a
los golpistas de Mubarak. Ahora, el recambio de oficiales de alto nivel
no significa ruptura con el pasado, es un recambio que se hace tal vez
buscando crear aliados más fieles a la Presidencia y al Congreso. El
hecho es que el presidente civil Mohamed Mursi pueda despedirlos,
destituirlos, especialmente al ministro de Defensa, Hussein Tantawi, es
positivo; pero por otro lado, debemos decir que el contenido de clase,
el contenido ideológico–político de los nuevos oficiales no representa
una ruptura. Según los datos que tenemos no son oficiales dispuestos a
una ruptura con Israel o mejorar las relaciones con Gaza. Son factores
que debemos considerar.
En un sentido es positivo que un Presidente civil pueda despedir a
militares. Por otro lado, el hecho de haber realizado consultas con los
militares antes de ordenar los cambios significa que son cambios con
algunos parámetros bastante estrechos.
Pero debemos seguir este proceso y ver en qué grado el Tribunal
Supremo, que es el último baluarte de Mubarak, trata de anular la
decisión otra vez. Es una lucha dentro de la institucionalidad pero
obviamente con un amplio apoyo popular, porque la policía y los
militares fueron declarados enemigos de la democracia.
EChI: ¿Cómo está la situación en Siria?
JP: Es obvio que Siria está recuperando sus territorios. Pero los
países occidentales utilizan estos mercenarios como carne de cañón. No
tienen mucha expectativa en su capacidad de ganar la guerra, aunque
piensan que pueden destruir viviendas e infraestructura, para
desestabilizar el gobierno y perjudicar a Siria, como lo han hecho en
Afganistán, Irak o Libia.
Lo que es más peligroso y destacado en el último período, es que los
terroristas, los mercenarios respaldados por Occidente, han dicho que
todos los empleados públicos, que son 1,5 millones de sirios, son ahora
blanco de asesinatos. Los terroristas quieren hacer lo que hicieron en
Irak, matar profesores, científicos, médicos, dentistas, etc. O sea,
cualquier persona calificada ahora es un enemigo, es un simpatizante de
Bashar Al Assad. Tienen un plan como el que se aplicó en Viet Nam, de
asesinatos no tan selectivos, de los empleados públicos. Todos están
sujetos a ese plan de asesinatos.
Esto no ha tenido la suficiente difusión, pues cuando dicen que
cualquier empleado del gobierno es un enemigo que debe ser asesinado,
estamos muy cerca de un genocidio y de la destrucción de una
civilización, al eliminar a los más calificados ciudadanos de una
sociedad.
EChI: Nos venimos a América Latina, donde resalta la escalada de violencia en México.
JP: El problema de fondo es que muchos sectores del Estado están
colaborando con los carteles. Los principales bancos siguen lavando
dinero. Entonces las líneas fundamentales para el sostén de los
narcotraficantes es que matan oficiales por un lado y reciben apoyo por
el otro.
Por ejemplo, el otro día una caravana de traficantes atacó un pueblo y
estuvieron matando y dominando el lugar por doce horas. Y la pregunta
es ¿dónde están los helicópteros? ¿Dónde están los aviones del gobierno?
¿Por qué demoraron más de doce horas para llegar?
Es porque hay una colaboración ya que hay miles de millones de
dólares en el tráfico de drogas y el nivel de corrupción en el Estado
Mexicano es enorme. Además tienen el apoyo de los bancos norteamericanos
y la venta de armas en Estados Unidos que sigue siendo muy fácil.
Por tanto, cuando tienes fuente de armas, fuente de financiamiento y
fuente de seguridad en manos de los carteles, ¿cómo puedes derrotarlos?
No se puede, nunca va a funcionar hasta que haya una revolución, una
purga completa del Estado y una eliminación de los vínculos con los
bancos lavadores en los Estados Unidos.
EChI: Es indudable el triunfo de Hugo Chávez en las elecciones del 7 de octubre, pero me pregunto qué pasará el día después.
JP: Es dudoso que pase algo porque el gran apoyo popular es la mejor
garantía, pues cualquier golpista o terrorista que trate de meterse va a
sufrir un golpe poderoso.
La amenaza de que Caracas va a arder si hay algún esfuerzo para
evitar la reelección de Chávez va a tener enormes consecuencias en todo
sentido. Es una de las medidas preventivas ese gran respaldo, esa fiebre
que afecta a la gran mayoría de los pobres que en un 80 o 90% están
apoyando a Chávez y que en la población general supera el 60%.
Ahora, posiblemente algunos esfuerzos terroristas pueden ser muy
factibles. Vimos la infiltración de operaciones especiales, del marine
que capturaron en Venezuela, es una indicación de que las fuerzas
especiales norteamericanas siguen siendo un punto de referencia para los
terroristas, que siguen investigando los lugares donde pueden actuar.
Pero creo que la correlación de fuerzas es muy favorable a Chávez hoy.
No creo que exista un sector golpista fuerte en el ejército
venezolano ni creo que los terroristas puedan tener inserción en algún
sector geográfico ni social. Ellos pueden comprar o contratar algún
terrorista colombiano lo que sea, pero la clase media no va a entrar en
la guerra de sicarios. Pueden gritar, pueden denunciar pero necesitan
algunos lumpen para meterse en algo así. Los chicos buenos están en el
country club jugando tenis y hablando mucho, pero sin capacidad de salir
a la calle y enfrentar las clases populares. No están en condiciones de
enfrentar un combate callejero ni pueden ganar electoralmente.
EChI: Bueno Petras, estupendos comentarios.
JP: Antes de terminar quiero hacer dos comentarios:
Primero sobre la masacre en Noruega del año pasado (1), oportunidad en la que comentamos que la policía estaba implicada (
http://www.lahaine.org/index.php?p=55392
). Si uno podía calcular la posibilidad del el desastre tanto en la
ciudad con las bombas y después en la masacre en la isla, era
inexplicable la tardanza de la policía.
Ahora, un año después, se conoce en Noruega el informe de una
Comisión que confirma lo que decíamos: Que la policía actuó con total
negligencia, no utilizó helicópteros para ir a la isla, no implementaron
medidas de seguridad en la ciudad.
Pero hablan de negligencia y yo creo que no van al fondo del asunto.
Es negligencia porque hay una ideología derechista entre la cúpula
militar – policial en Noruega y eso la Comisión no lo quiere reconocer.
Simplemente hablan de falta de eficiencia; pero en todo caso confirman
nuestro diagnóstico de que era posible salvar vidas, pero la Policía no
actuó.
El segundo comentario es sobre las dos caras de los Juegos Olímpicos.
La prensa hoy día destaca el espectáculo inglés de luces, bombos,
cantantes, de rock, populares, etc.; y esa diversión es muy interesante,
pero por otro lado nada se dice respecto a que Inglaterra gastó más de
15 mil millones de dólares en los Juegos Olímpicos dejando pérdidas
inmensas. Hay recortes en Educación, en Salud, recortes en las
subvenciones para los pobres; el número de negocios que están al borde
la quiebra es impresionante, debido a que nadie quería ir a los los
lugares olímpicos, turísticos, por las muchedumbres y por las
restricciones policiales…
Al final de cuentas, no sólo los Juegos Olímpicos se realizaron con
un costo altísimo, sino que ocurrieron en un momento en que Inglaterra
esta en plena recesión y está recortando los programas sociales, dejando
a los pobres en situación peor que antes de los Juegos. Por eso hablo
de dos caras de los Juegos Olímpicos, una cara para el mundo externo y
otra cara para la pobreza interna.
Nota (1) El atentado de Oslo pudo haber sido evitado
Una comisión independiente creada para sacar las conclusiones de los
ataques del 22 de julio de 2011 en Noruega criticó severamente el lunes a
la policía, juzgando que el atentado con bomba de Oslo habría podido
ser evitado y su autor, Anders Behring Breivik, detenido antes.
“El ataque contra el barrio de los ministerios el 22 de julio (de
2011) habría podido ser evitado gracias a la aplicación eficaz de las
medidas de seguridad existentes”, concluyó la comisión en un informe
entregado al primer ministro Jens Stoltenberg. “Una intervención de la
policía era verdaderamente posible. El autor de los atentados habría
podido ser detenido antes”, añade el informe.
El 22 de julio de 2011, el ultraderechista Breivik hizo estallar una
poderosa bomba a las puertas del edificio gubernamental en Oslo donde
tiene sus oficinas el Primer Ministro, provocando la muerte de ocho
personas.
Posteriormente, vestido de policía, disparó a mansalva durante más de
una hora contra una multitud de la Juventud Socialdemócrata reunida en
un campamento de verano en la isla de Utoya, frente a Oslo, dejando un
saldo de 69 muertos, casi todos adolescentes.
La policía noruega fue muy criticada por su lentitud, ya que pasaron
tres horas entre el atentado de Oslo y la detención de Breivik en la
isla de Utoya, cuando su nombre era conocido ya por los servicios de
seguridad.
La masacre de Utoya duró una hora y cuarto. La policía tuvo
dificultades para encontrar la manera de llegar a esa pequeña isla
situada en un lago, a 600 metros de la costa.
Extractado por La Haine