sábado, 21 de junio de 2014
El abogado José Luis
Mazón, en representación del partido Soberanía de la Democracia
(Soberanía), ha denunciado ante la Oficina de Conflicto de Intereses al
presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, por mantener su plaza como
titular del Registro de la Propiedad de Santa Pola, en la provincia de
Alicante, tal y como había informado Atlántica XXII en su número 17, el
pasado mes de noviembre.
El presidente del
Gobierno capitanea el mayor grupo de presión de los registradores de la
propiedad, que ha conseguido mantener privilegios de la época
franquista, únicos en Europa.
Desde 1981, Rajoy
mantiene la plaza como registrador en Santa Pola, que le ha procurado
unos 20 millones de euros (3.327.720.000 pts.), según denuncia la
Asociación de Usuarios de Registros.
¿Recuerdan cuando en el
programa de TVE Tengo una pregunta para usted en marzo de 2009 María
Violeta Aranguren, de cincuenta y tres años y vecina de Ansoáin
(Navarra), visiblemente nerviosa le preguntaba a Mariano Rajoy un poco
cortada:“¿No será mucha molestia que me diga cuánto gana usted?”. El
líder del PP quedó traspuesto y, para ganar tiempo y pensar la
respuesta, haciendo gala de sus tablas como hombre público, le contestó
que no le había oído y que le volviera a preguntar.Una vez recuperada la
compostura tras la “insolente” pregunta, Rajoy no le dijo lo que
ganaba. Tan solo un escueto “bastante más que usted” e irse,
seguidamente, por peteneras. Un millón de euros al año.
Un millón de euros al
año (166.386.000 Pts.) es la estimación (a la baja) de sus ingresos por
su actividad política y por su plaza de registrador en Santa Pola
(Alicante) de la que, según la Asociación de Usuarios de Registros, ha
percibido desde 1981 unos 20 millones de euros (3.327.720.000 pts.) y a
la que nunca ha renunciado.
El registro de Santa
Pola le reporta entre 800.000 y un millón de euros al año. A ello hay
que añadir los cerca de 100.000 euros que recibe del PP en concepto de
dietas y gastos más los 72.000 euros que cobra por su trabajo como
diputado en el Congreso. ATLÁNTICA XXII trató de ponerse en contacto por
escrito con Rajoy para recabar su opinión al respecto, aunque sin
éxito.
El multimillonario Rajoy
es uno de los principales cabecillas del lobby de los registradores de
la propiedad de España, una minoría (un millar de personas), una casta
poderosa que vive aún de los privilegios feudales en los que el Derecho
no ha podido penetrar. Son los registradores, que ganan siempre en
cualquier coyuntura económica por la sencilla razón de que todo pasa
obligatoriamente por el Registro. Ningún
negocio del mundo tiene asegurada una clientela como la de este gremio
que en tiempos de crisis gana aún más (las ganancias medias netas de los
registradores se estiman en un millón de euros anuales).
En los Registros de la
Propiedad sus titulares se forran con la expedición masiva de
certificaciones y notas para los acreedores que desean informarse de los
bienes de los deudores; se forran con las ejecuciones de hipotecas por
impago de bancos; se forran por novaciones de préstamos; se forran por
embargos de todo tipo: judiciales de particulares o de la agencia
tributaria. La crisis no ha hecho más que engrosar sus cuentas
corrientes y todo ello gracias a Rajoy y a su lobby, que impidió durante
el Gobierno de José María Aznar que se modificara una situación
preconstitucional que permitía a unos funcionarios públicos percibir,
por la prestación de un servicio público en régimen de monopolio, sus
retribuciones directamente de los usuarios privados o públicos.¿Alguien
conoce algún funcionario que expida una factura con su IVA al usuario
por un servicio público? Pues los registradores sí.
Esta y otras denuncias
han sido realizadas públicamente (aunque con escasa repercusión
mediática) por la Asociación de Usuarios de Registros, que dirige el
notario Javier Martínez del Moral, para quien Mariano Rajoy ha querido
hacer política sin renunciar a percibir el beneficio económico de un
Registro de la Propiedad: “La utilización de este artículo por el señor
Rajoy, caso de comprobarse, constituiría ya de por sí causa de
inhabilitación del mismo para la cosa pública, pues habría ocultado sus
enormes ingresos incompatibles, de forma constante y contumaz, durante
veinte años”.
Mariano Rajoy lleva
veinte años en excedencia y tiene la reserva de plaza del Registro de la
Propiedad de Santa Pola, plaza que está en régimen de interinidad
permanente.Según la Asociación de Usuarios de Registros, Rajoy nombró
registrador permanente accidental de Santa Pola a Francisco Riquelme, su
amigo y compañero de promoción desde 1977, denunciado por diversas
irregularidades en fincas de su propiedad. La
operación es posible por una norma del Colegio de Registradores, a la
que se acogió el político gallego, que permite designar como interino a
un compañero y repartirse con él al 50% las ganancias sin que la plaza
salga a concurso.
La Asociación considera
que esta peculiar opción constituye “un privilegio inaudito y único en
el mundo” y fue un logro de Rajoy en su época de ministro. El 50% de las
ganancias que se lleva Rajoy se justifica como cuota colegial, aunque
para esta Asociación es una falsa cuota “que compone un inevitable
rosario de fraudes fiscales”. Este señor es el que se supone que nos va a poner a todos a “hacer los deberes”.
La inmensa mayoría de
españoles (clase media y baja) está siendo brutalmente castigada por
organizaciones endogámicas (partidos políticos, jueces elegidos por
éstos, sindicatos, mundo financiero, etc.…) que dirigen lo que queda de
este país. La gente empieza a cansarse de que los vapuleen y se rían en
su cara. Cuando se cachondean de ti con todo el morro, hasta el más
ovino se rebela. Los españoles solemos ser gente pacífica y hay que
reconocer que aguantamos carros y carretas pero la historia demuestra
que cuando se le tira demasiado del bocado, el español explota y lo hace
violentamente. Mejor no ponerse por medio porque el asunto acaba mal y
es difícil de parar.
Esperemos que la
situación, en todos los aspectos, se vaya solucionando porque si dichos
poderes siguen pisando el cuello del pueblo con su bota de hipocresía,
injusticia y mentiras, acabará mordiéndola y se comerá la bota y el pié