A raíz de la tragedia, miles de turcos se manifestaron en las
principales ciudades del país para denunciar las condiciones de trabajo
en las minas y responsabilizar al Gobierno con el desastre.
Ankara, 17 may (PL) El accidente
ocurrido el pasado martes en la mina de carbón de Soma, en el oeste del
país, dejó un saldo definitivo de 301 muertos, informó hoy el Gobierno
turco. El último cadáver fue extraído de la instalación tras cuatro días
de operaciones de rescate, declaró el ministro de Energía, Taner
Yıldız. De acuerdo con la edición digital del diario Hurriyet, cuando
los equipos de rescate dejaron el área Yildiz refirió que no existían
reportes de más trabajadores desaparecidos. Sin embargo, agregó que la
mina se revisaría de nuevo minuciosamente.
Declaraciones anteriores del ministro
advirtieron sobre los inconvenientes que entorpecieron la extracción de
los cuerpos, entre ellos un nuevo incendio en el pozo, luego de la
extinción del fuego original iniciado el día 13.
A raíz de la tragedia, miles de turcos
se manifestaron en las principales ciudades del país para denunciar las
condiciones de trabajo en las minas y responsabilizar al Gobierno con el
desastre.
Como parte de las protestas, una multitud se congregó ayer en
Soma, pero fue dispersada por cañones de agua, gases lacrimógenos y
balas de goma de la policía. Los medios nacionales también reportaron
varios arrestos y otros enfrentamientos de las fuerzas del orden con
manifestantes pacíficos a lo largo de la nación. En la mina se
encontraban casi 790 personas en el momento del incidente, del cual aún
se desconocen las causas.
La compañía Soma Holding, encargada de
la excavación, negó toda responsabilidad sobre el accidente y aseguró
que no se cometieron errores en la operación minera. En cambio, los
sindicatos atribuyen lo ocurrido a los recortes del presupuesto
destinado a la seguridad y las irregularidades en el cumplimiento de las
normas de protección tras la privatización de las instalaciones.
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