El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha denunciado este miércoles los planes de Estados Unidos y sus aliados en Occidente y Oriente Medio para atacar Siria, so pretexto de que el Gobierno de Damasco fue el que usó armas químicas contra la población civil de su propio país.
El mandatorio venezolano ha señalado con el dedo acusador a los Estados Unidos y sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), como quienes ayudaron a los terroristas sirios en su ofensiva contra el Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad, con el objetivo de preparar el terreno para una intervención militar en Siria.
“Desde Venezuela nos sumamos a las voces del mundo que rechazan los planes para una intervención militar Imperial contra el pueblo de Siria”, ha afirmado.
Asimismo, el mandatario venezolano ha definido la agresión militar contra Damasco como “una guerra de conquista”, esta vez, contra un pueblo árabe que es el eje de la estabilidad en la región.
“Ahora quieren partir en pedazos a Siria, han armado grupos terroristas extremistas, les han dado armas, las más modernas del mundo para destruir Siria”, ha manifestado.
Igualmente, ha subrayado las similitudes entre los hechos que acontecen en la actualidad en Siria, con los ocurridos en Libia e Irak, y ha instado a los Gobiernos pacifistas del mundo y a sus pueblos, a colaborar con el fin de parar una nueva guerra en el mundo.
“¿Quién paga toda la destrucción contra los pueblos árabes de Irak, Libia, Palestina? ¡La conciencia del mundo debe despertar y detener esta guerra!”, ha señalado.
Venezuela, junto con Cuba, Ecuador y Bolivia, es uno de los países latinoamericanos que ha alzado ya su voz para rechazar el inminente ataque de Estados Unidos y sus aliados contra Siria.
OTRA HUMANIDAD ES NECESARIA
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