El
gobernador de la isla de Okinawa, en el sur de Japón, Takeshi Onaga, ha
ordenado paralizar las obras relacionadas con el establecimiento de una
base militar estadounidenses en la zona.
Además el gobernador de Okinawa, según informó la agencia mexicana Notimex, ha explicado que “esto es debido a que los bloques de hormigón de las obras están dañando los arrecifes de coral de la zona”
En esta misma línea, ha indicado que si el ministerio no sigue la instrucción, el gobierno de la prefectura podría revocar en una semana el permiso para la construcción de esa instalación.
Ante las declaraciones de Onaga, el portavoz del Gobierno nipón, Yoshihide Suga, ha asegurado que las autoridades japonesas no tienen intención alguna de suspender las obras relacionadas con el establecimiento de la base militar en Okinawa y “siguen trabajando sin ningún retraso”.
Se trata de un plan de Estados Unidos que tiene como objetivo mover la base aérea de Futenma, en las costas norteñas de la isla a una costa más remota de la isla de Henoko, en Nago.
Estados Unidos y Japón acordaron en 1996 reubicar la base aérea de Futenma en Henoko, pero la oposición de la población local y de grupos ambientalistas han impedido las obras de construcción.
En cuanto a la presencia de Estados Unidos en este país asiático, hay que mencionar que el 75 por ciento de las bases norteamericanas en Japón se encuentra en la isla de Okinawa y alrededor de la mitad del total de los 50.000 militares estadounidenses están estacionados en esta misma provincia.
Durante los últimos años, la presencia militar de Estados Unidos en el país asiático ha provocado una ola de críticas hacia el Gobierno de Tokio, que cada vez los ciudadanos japoneses salen a las calles para mostrar su rechazo a la presencia militar estadounidense en su país.
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