Publicado en: 14 febrero, 2015
Por Kaos. Sanidad
La Plataforma de Afectados por la Hepatitis C (PLAFHC) ha
registrado ante el Tribunal Supremo (TS) una querella criminal contra el
ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, su antecesora en el cargo Ana
Mato, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS)
y el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS) por 2
delitos […]
La Plataforma de Afectados por la Hepatitis C (PLAFHC) ha registrado ante el Tribunal Supremo (TS) una querella criminal contra el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, su antecesora en el cargo Ana Mato, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) y el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS) por 2 delitos de homicidio y 37 de lesiones de pacientes que no han tenido acceso a los nuevos medicamentos de última generación.
“Venimos a pedir ayuda al Supremo, a pedir justicia. Lo
hemos intentado a través de la presión y la denuncia, y también hemos
tratado de hablar con un Gobierno que no nos ha querido atender en
ningún momento”, ha defendido Eva Martínez, responsable jurídica de la
plataforma, tras registrar la denuncia ante el tribunal.
Todos los casos incluidos en la querella cuentan con el
informe pericial de un hepatólogo, y el 80 por ciento tenían prescritos
desde hace seis meses a un año algunos de los nuevos fármacos que ha
aprobado el Ministerio en el último año. No obstante, algunos de ellos
ya la han recibido, gracias a la presión mediática, según ha reconocido
la portavoz.
En estos casos que tenían los fármacos prescritos, el
grado de fibrosis del hígado que presentan es F3. El resto son pacientes
más graves, con fibrosis F4, que no la tienen prescrita pero “ya no
existe otra posibilidad de tratamiento porque los anteriores han fallado
o han provocado graves secuelas, y solo les queda una vía”.
Martínez ha avanzado que esta querella no será la última
que presenten ante este tribunal, y que en los próximos 15-20 días
presentarán una nueva iniciativa con otros 30 casos. “No vamos a parar
hasta que los 35.000 casos graves que hay en este país reciban la
medicación”, ha avanzado.
Agencias