El sacerdote denuncia que son secuestrados, entrenados y luego los ponen a trabajar en plazas nacionales.
Por Laura Xicoténcatl
El
padre Alejandro Solalinde, quien dirige el albergue “Hermanos en el
Camino”, ubicado en Ixtepec, Oaxaca y uno de los organizadores de la
caravana “Paso a paso hacia la paz” que emulará la ruta de muerte que
realizan los indocumentados desde Tenosique, Tabasco, hacia Orizaba,
Veracruz, denunció que el grupo delictivo ‘Los Zetas’ suelen secuestrar a
hombres y mujeres indocumentados y los obligan a trabajar para ellos
como halcones.
En
entrevista vía telefónica a la radio local de Tabasco, previo a la
movilización contra de los secuestros y violaciones a los derechos de
los migrantes que inició el sábado 23 de manera simultánea en Nicaragua,
Honduras, El Salvador y Guatemala, y culminará en México el domingo 31
de julio, Solalinde aseguró que él ha recibido testimonios de los
plagiados, según los cuales los sicarios adiestran a los ilegales y los convierten en su ejército de reserva.
Solalinde
manifiesta que se trata de una nueva versión de la leva en la que los
migrantes centroamericanos y mexicanos son tomados como “desechables”.
El
sacerdote dijo que los plagios de migrantes por parte de ‘Los Zetas’
comenzaron a denunciarse hace dos años. Al principio los sicarios no
pedían rescate a los familiares, más bien obligaban a sus víctimas a
trabajar para ellos.
Según
los testimonios reunidos por Solalinde, luego de llevar tiempo
desaparecidos, algunos jóvenes llamaban por teléfono a sus familiares
para decirles que no dijeran nada al Ejército o la policía, ni
intentaran buscarlos; les comentaban que estaban trabajando para ‘Los
Zetas’, mejor se olvidaran de ellos porque nunca los iban a soltar.
“Los
migrantes están atrapados. Los sicarios primero los entrenan y luego
los ponen a trabajar en las plazas nacionales que controlan o incluso
fuera del país. No se pueden salir del entorno al que los confinan
porque los matan”, relató.
“Tuvimos
información de que un par de jóvenes de Veracruz fueron obligados a
participar en una matanza en Guatemala. (Los Zetas) se los llevaron para
allá y los forzaron a matar a la gente. ¡Imagínese lo que estarán
haciendo en otros lados del país”, expresó el defensor de los derechos
humanos de los migrantes.
El
padre Solalinde es el encargado del área pastoral de migrantes de la
Conferencia del Episcopado Mexicano y del albergue Hermanos en el
Camino. Comenta que lo mejor que les podría pasar a estos “nuevos
esclavos” del crimen organizado es que los metieran a la cárcel porque,
aunque les den una sentencia larga, por lo menos se zafarían del poder
de los narcotraficantes.
Tras
mencionar las entidades en las que ocurre este fenómeno, insiste en que
es Veracruz el territorio donde es mayor el reclutamiento forzado. Y
advierte que ahora los criminales están secuestrando a los adolescentes
de los pueblos y ciudades veracruzanas.
OTRA HUMANIDAD ES NECESARIA
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