18 de Mayo de 2014 13:30
Un varón de 53 años clavó en la espalda a la víctima, que acabó con
cortes en la cara, rodillas y brazos. La culpa es de twitter que los
tiene como locos...
Agencias
Agentes de la Policía Nacional de Vigo detuvieron ayer a un varón de 53 años que supuestamente intentó matar a su exjefe, que lo había despedido pocos días antes, con una hoz que le clavó por la espalda e intentó clavársela también en el pecho.
La víctima, que presentaba otros cortes en la cara, los brazos y las rodillas, además de laceraciones en el cuero cabelludo, es el dueño de un aparcamiento anexo al hospital Meixoeiro de Vigo, informaron fuentes policiales.
El detenido, según relató el dueño del negocio, se presentó en la oficina y sin mediar palabra cogió una silla con la que lo golpeó y lo derribó. Tras golpearlo en el suelo, lo levantó y lo lanzó contra una mesa de cristal, que se fracturó por el impacto.
Luego, siempre según el relato de la víctima, le golpeó la cabeza contra un bloque de hormigón. El jefe consiguió salir de la oficina, y durante la persecución, el exempleado cogió una hoz que había en el jardín y se la clavó en la espalda mientras escapaba.
Luego se la intentó clavar en el pecho, pero la víctima lo impidió al protegerse con un brazo y a continuación pudo resguardarse en su vivienda, que está en una finca anexa al aparcamiento.
Una vez en el lugar, la Policía solicitó la presencia de personal sanitario para que atendiera a la víctima, al tiempo que localizó la hoz manchada de sangre y dio con el presunto autor de la agresión, al que imputa un delito de homicidio en grado de tentativa.
Agentes de la Policía Nacional de Vigo detuvieron ayer a un varón de 53 años que supuestamente intentó matar a su exjefe, que lo había despedido pocos días antes, con una hoz que le clavó por la espalda e intentó clavársela también en el pecho.
La víctima, que presentaba otros cortes en la cara, los brazos y las rodillas, además de laceraciones en el cuero cabelludo, es el dueño de un aparcamiento anexo al hospital Meixoeiro de Vigo, informaron fuentes policiales.
El detenido, según relató el dueño del negocio, se presentó en la oficina y sin mediar palabra cogió una silla con la que lo golpeó y lo derribó. Tras golpearlo en el suelo, lo levantó y lo lanzó contra una mesa de cristal, que se fracturó por el impacto.
Luego, siempre según el relato de la víctima, le golpeó la cabeza contra un bloque de hormigón. El jefe consiguió salir de la oficina, y durante la persecución, el exempleado cogió una hoz que había en el jardín y se la clavó en la espalda mientras escapaba.
Luego se la intentó clavar en el pecho, pero la víctima lo impidió al protegerse con un brazo y a continuación pudo resguardarse en su vivienda, que está en una finca anexa al aparcamiento.
Una vez en el lugar, la Policía solicitó la presencia de personal sanitario para que atendiera a la víctima, al tiempo que localizó la hoz manchada de sangre y dio con el presunto autor de la agresión, al que imputa un delito de homicidio en grado de tentativa.
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