21-04-2014
Consummatum est
Consummatum est
Se acabó todo» o «Todo está cumplido». He traído a pelo estas expresiones clásicas, terminada la Semana Santa, las cuales, según la traducción de la Vulgata Latina (Evangelio de Juan 19.30), fueron las últimas palabras de Jesús de Nazaret en la cruz.
Aquello de que todo se repite, de la tragedia a la comedia, ha tomado cuerpo en esta especie de sainete, que sería de los Álvarez Quintero si no hubiese familias necesitadas de por medio (el número definitivo se lo dejo a los tahúres de la Junta de Andalucía). Si no hubiese familias excluidas de la sociedad, y no se jugara con la ley (Salvador de Madariaga en Las Cortes de 1931: «Estamos, sí, defendiendo la República; ¿pero qué es la Republica sino la ley?»). Si no se jugara con sentimientos y valores de la sedicente izquierda. Si no se jugaran, en la tierra andaluza, jugadas personales y estratégicas de grupos del PSOE y de IU, sobre el qué hacer el día siguiente a las elecciones europeas.
Si alguien acepta y entiende que Juan Carlos de Borbón y su fiel Armada hicieron movimientos febriles y febreriles a fin de dar un «golpe de timón» a la política de Suárez, debe aceptar y entender que Susana Díaz y su fiel Valderas (ahí están las ternuras fotográficas) hicieran movimientos abrilires para dar un «golpe de timón» a las «excesivas demandas» de IULV-CA y a su deriva radical por parte de Maíllo, y populista de la mano de Cortés, Meyer, Mariscal y compañeros mártires. Estos lodos, aquellos polvos.
Cuando hace veinte años («veinte años no son nada») IULV-CA obtuvo 20 diputados y tomó la decisión política de «gobernar desde el Parlamento», casualmente (o sin casualidad), se fue conformando un grupo de presión que se reunía en un apartamento oficial a hacer ejercicios espirituales y espirituosos (pruebas de ello hay jocosas intervenciones en la Cámara). Alguna que otra tarde invitaban a Gaspar Zarrías y a José Caballos. No voy a decir que filtraran información de IU a tan dignos personajes (al filtrador ya le llegará su San Martín), pero sí que, en la puesta en común de la situación política, dejaban entrever al PSOE sus querencias y diferencias... Eran tan simpáticos los invitados. De simpatía a simpatía, pasaron a enhebrar acuerdos. Por ejemplo, en el penúltimo, cerraron que el PSOE nos aprobaría a IU algunas enmiendas a los Presupuestos de 1996 a cambio de que no hiciéramos comparecer a Chaves en la comisión de investigación sobre un préstamo condonado en Caja Jerez... Chaves compareció...
Tras las elecciones del 96, la pandilla permaneció y permanece en la actualidad. Por supuesto, altamente colocada. Y, en sus nuevos aposentajes (los actuales sobre todo), han descubierto las cosquíllelas sensuales que dan la cercanía a algunas personas que dicen que una vez estuvieron con alguien que sintió la «erótica del poder». Y se dijeron que no podían permitir, en sus análisis intelectuales, que IULV-CA se despeñara de las alturas de sus gobiernos y de sus poderíos (que no poder). De ahí a la «razón de Estado», un paso. De ahí a pedir que se vote la propuesta del PSOE en la comisión de los ERE, otro paso. De ahí a atacar a Alaya (¿qué pintáis vosotros ahí?), dos pasos. De ahí a votar Presupuestos indignos por imperativo legal, tres pasos... y así, pasito a pasito, a convertirse en el Jordán donde se lavan los pecados del PSOE, un achuchón.
«Mira Dieguito, no achuchéis, aunque no ahoguéis». «¿Qué pasa, Presi?» «Pues nada, cari, que me he gastado un montón de euros en peluquería de mi bolsillo para que ahora amenacéis con un vendaval legislativo. Es que no puedo aguantar. Tengo el patio de mi casa levantao». «No te preocupes por eso que yo conozco a un albañil de Bollullos...» «Que no es eso, que hablo del patio político». «Hija es que hablas tan intelectual... ¿En qué puedo ayudar a mi princesa?» «Pues de príncipes y reyes quiero hablarte. Me han leído un resumen del libro de Pilar Urbano, y me he quedado con la idea del golpe blando para centrar el timón». «¿Yyyyy?» «Pos imagínate que yo soy el Rey, y me preocupa la deriva del país. ¿A quién llamo? Pos a mi amigo Armada». «¿Eres amiga de Armada?» «No, te hablo en metáfora. Tú eres mi Armada, y Maíllo, Cortés y esa gente, que no te merecen, son la encarnación de Suárez».
Unos días después. «Mira, Dieguito, vente a comer al Palacio, que ya tengo preparada la trampa». En Palacio. «Tenía un apañillo con Zoido, para arreglar lo de la Corrala, y no se entera. He hecho que llegue al oído de la niña Elena, y ésa okupa media ciudad para demostrar que sabe tomar el Palacio de Invierno. Entonces la ceso, tú ordenas a tus gentes que tengan visión de Estado y que lo acepten, que ya les daré una compensación». «Es que eso de quitar a Elenita es muy fuerte, y se sublevarán». «Bueno, un golpe de timón más suave: le quitaré las competencias de regalar viviendas. Tú hablas de la ley y el orden, le dices a Maíllo que se vaya, que no sabe de política, y tú vuelves a coordinar a la izquierda posible, europea, social y demócrata. Porque tú tienes al ejército y a los coroneles de IU de tu parte» «En formación de combate para entrar en la Tierra Prometida». «Mira, Dieguito, que esto es una operación de Estado. Yo me tiro al agua si tú me aseguras que hay agua. Que si no, quien se pega la hostia soy yo..., y entonces, cari, te vas a enterar lo que vale un peine».
No tengo que soltar aquello de «a Dios pongo por testigo». Es la palabra de Zico y Paca contra quien diga que lo anterior es falso. «Y más alante hay más». He utilizado un lenguaje bufonesco porque no he querido darle seriedad a quien no se la merece. La política, perdón, la Política con mayúsculas que yo al menos conocí, era cosa mucho más seria. Sin jugar con los sentimientos y las desgracias de la gente.
[Zico y Paca, mis perros, salen de la biblioteca con El poder en los dramas de Shakespeare de Trillo. Paca recita: «¿De qué sirve el traidor, siendo la traición hecha?» En una inversión de papeles, Zico le responde «... pues el traidor sirve, para la siguiente traición»]
elmundoandalucia
Se acabó todo» o «Todo está cumplido». He traído a pelo estas expresiones clásicas, terminada la Semana Santa, las cuales, según la traducción de la Vulgata Latina (Evangelio de Juan 19.30), fueron las últimas palabras de Jesús de Nazaret en la cruz.
Aquello de que todo se repite, de la tragedia a la comedia, ha tomado cuerpo en esta especie de sainete, que sería de los Álvarez Quintero si no hubiese familias necesitadas de por medio (el número definitivo se lo dejo a los tahúres de la Junta de Andalucía). Si no hubiese familias excluidas de la sociedad, y no se jugara con la ley (Salvador de Madariaga en Las Cortes de 1931: «Estamos, sí, defendiendo la República; ¿pero qué es la Republica sino la ley?»). Si no se jugara con sentimientos y valores de la sedicente izquierda. Si no se jugaran, en la tierra andaluza, jugadas personales y estratégicas de grupos del PSOE y de IU, sobre el qué hacer el día siguiente a las elecciones europeas.
Si alguien acepta y entiende que Juan Carlos de Borbón y su fiel Armada hicieron movimientos febriles y febreriles a fin de dar un «golpe de timón» a la política de Suárez, debe aceptar y entender que Susana Díaz y su fiel Valderas (ahí están las ternuras fotográficas) hicieran movimientos abrilires para dar un «golpe de timón» a las «excesivas demandas» de IULV-CA y a su deriva radical por parte de Maíllo, y populista de la mano de Cortés, Meyer, Mariscal y compañeros mártires. Estos lodos, aquellos polvos.
Cuando hace veinte años («veinte años no son nada») IULV-CA obtuvo 20 diputados y tomó la decisión política de «gobernar desde el Parlamento», casualmente (o sin casualidad), se fue conformando un grupo de presión que se reunía en un apartamento oficial a hacer ejercicios espirituales y espirituosos (pruebas de ello hay jocosas intervenciones en la Cámara). Alguna que otra tarde invitaban a Gaspar Zarrías y a José Caballos. No voy a decir que filtraran información de IU a tan dignos personajes (al filtrador ya le llegará su San Martín), pero sí que, en la puesta en común de la situación política, dejaban entrever al PSOE sus querencias y diferencias... Eran tan simpáticos los invitados. De simpatía a simpatía, pasaron a enhebrar acuerdos. Por ejemplo, en el penúltimo, cerraron que el PSOE nos aprobaría a IU algunas enmiendas a los Presupuestos de 1996 a cambio de que no hiciéramos comparecer a Chaves en la comisión de investigación sobre un préstamo condonado en Caja Jerez... Chaves compareció...
Tras las elecciones del 96, la pandilla permaneció y permanece en la actualidad. Por supuesto, altamente colocada. Y, en sus nuevos aposentajes (los actuales sobre todo), han descubierto las cosquíllelas sensuales que dan la cercanía a algunas personas que dicen que una vez estuvieron con alguien que sintió la «erótica del poder». Y se dijeron que no podían permitir, en sus análisis intelectuales, que IULV-CA se despeñara de las alturas de sus gobiernos y de sus poderíos (que no poder). De ahí a la «razón de Estado», un paso. De ahí a pedir que se vote la propuesta del PSOE en la comisión de los ERE, otro paso. De ahí a atacar a Alaya (¿qué pintáis vosotros ahí?), dos pasos. De ahí a votar Presupuestos indignos por imperativo legal, tres pasos... y así, pasito a pasito, a convertirse en el Jordán donde se lavan los pecados del PSOE, un achuchón.
«Mira Dieguito, no achuchéis, aunque no ahoguéis». «¿Qué pasa, Presi?» «Pues nada, cari, que me he gastado un montón de euros en peluquería de mi bolsillo para que ahora amenacéis con un vendaval legislativo. Es que no puedo aguantar. Tengo el patio de mi casa levantao». «No te preocupes por eso que yo conozco a un albañil de Bollullos...» «Que no es eso, que hablo del patio político». «Hija es que hablas tan intelectual... ¿En qué puedo ayudar a mi princesa?» «Pues de príncipes y reyes quiero hablarte. Me han leído un resumen del libro de Pilar Urbano, y me he quedado con la idea del golpe blando para centrar el timón». «¿Yyyyy?» «Pos imagínate que yo soy el Rey, y me preocupa la deriva del país. ¿A quién llamo? Pos a mi amigo Armada». «¿Eres amiga de Armada?» «No, te hablo en metáfora. Tú eres mi Armada, y Maíllo, Cortés y esa gente, que no te merecen, son la encarnación de Suárez».
Unos días después. «Mira, Dieguito, vente a comer al Palacio, que ya tengo preparada la trampa». En Palacio. «Tenía un apañillo con Zoido, para arreglar lo de la Corrala, y no se entera. He hecho que llegue al oído de la niña Elena, y ésa okupa media ciudad para demostrar que sabe tomar el Palacio de Invierno. Entonces la ceso, tú ordenas a tus gentes que tengan visión de Estado y que lo acepten, que ya les daré una compensación». «Es que eso de quitar a Elenita es muy fuerte, y se sublevarán». «Bueno, un golpe de timón más suave: le quitaré las competencias de regalar viviendas. Tú hablas de la ley y el orden, le dices a Maíllo que se vaya, que no sabe de política, y tú vuelves a coordinar a la izquierda posible, europea, social y demócrata. Porque tú tienes al ejército y a los coroneles de IU de tu parte» «En formación de combate para entrar en la Tierra Prometida». «Mira, Dieguito, que esto es una operación de Estado. Yo me tiro al agua si tú me aseguras que hay agua. Que si no, quien se pega la hostia soy yo..., y entonces, cari, te vas a enterar lo que vale un peine».
No tengo que soltar aquello de «a Dios pongo por testigo». Es la palabra de Zico y Paca contra quien diga que lo anterior es falso. «Y más alante hay más». He utilizado un lenguaje bufonesco porque no he querido darle seriedad a quien no se la merece. La política, perdón, la Política con mayúsculas que yo al menos conocí, era cosa mucho más seria. Sin jugar con los sentimientos y las desgracias de la gente.
[Zico y Paca, mis perros, salen de la biblioteca con El poder en los dramas de Shakespeare de Trillo. Paca recita: «¿De qué sirve el traidor, siendo la traición hecha?» En una inversión de papeles, Zico le responde «... pues el traidor sirve, para la siguiente traición»]
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