lunes, 16 de diciembre de 2013
Denunciamos que los crímenes del régimen pueden alcanzar incluso a los niños. Por si fuera poco con lo sucedido en Alcalá de Guadaira
donde tres miembros de una familia murieron por ingerir alimentos que
obtenían de contenedores de basura, ahora nos enteramos de que en la
ciudad de Castellón los escolares buscan comida en las papeleras del
colegio.
El deterioro de la
situación económica de las familias castellonenses afecta de lleno a la
población infantil. La Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos
(FAPA) Penyagolosa ha constatado en la provincia casos de niños que
buscan comida en las papeleras del colegio. También tienen constancia de
maestros que llevan alimentos a clase para repartirlos entre alumnos
necesitados.
"Sabemos que en algunos
colegio hay niños que se marean porque no han desayunado o cenado.
También nos han trasladado casos de alumnos que buscan comida en las
papeleras y tenemos constancia de que hay algún profesor que se lleva
fruta al centro para repartirla. Eso está pasando en Castelló", relata
la presidenta de FAPA Penyagolosa, María Dolores Tirado.
Una situación que puede
empeorar con la interrupción del comedor escolar, que garantiza al menos
una comida equilibrada al día a los niños. Varias asociaciones han dado
la voz de alarma ante la precaria situación en la que se pueden quedar
las familias más necesitadas cuando sus hijos, en las vacaciones de
verano, no puedan seguir becados en los comedores escolares. Alertan de
los riesgos de desnutrición infantil.
Comedores sociales
Los comedores sociales
se han convertido en tabla de salvación para mucha gente sin recursos.
El Padre Ricardo confirma un notable incremento de personas que acuden
al suyo. Los fines de semana, cuando no hay clase ni comedor escolar,
"vienen las familias con los hijos", admite. El Padre Ricardo afirma que
con el final del curso escolar "tal vez se note" más afluencia de
niños. Por su parte, en Cáritas no han constatado presencia de menores
en su comedor. Desde la entidad afirman que si les llega algún caso de
un niño con problemas nutricionales se deriva a Servicios Sociales.
La merienda de Cruz Roja
Cruz Roja tiene en
marcha en la provincia el programa Promoción Éxito Escolar. Surgió con
el propósito de prevenir el fracaso escolar a través de clases de
refuerzo. Sin embargo, desde Cruz Roja detectaron que los menores
participantes no tenían una dieta variada y decidieron proporcionarles
una merienda, que incluye lácteos y fruta, entre otros alimentos.
También se ha impartido alguna charla sobre nutrición a sus familias .
El programa ha incluido a
150 menores de entre 4 y 16 años en Castelló, Sant Mateu, Almassora,
Vila-real, Peñíscola, Vinaròs, la Vall d'Uixó, Cabanes y Burriana. Cruz
Roja estudia dar continuidad a esta iniciativa en los meses estivales,
incluyendo el reparto de alimentos.
Alarma social
Ante la inminente
finalización del curso escolar se ha advertido de la situación de
desamparo en que quedan muchos menores en la Comunitat Valenciana.
Diversos colectivos alertan de que sin el comedor del colegio estos
niños no dispondrán de la alimentación mínima diaria. La Diputación de
Valencia, adelantándose de nuevo al resto de administraciones, tiene
previsto aprobar un decreto para destinar medio millón de euros a los
ayuntamientos valencianos con el fin de que se garantice al menos una
comida al día a los niños con riesgo de desnutrición. Una posición que
constata con la de la Generalitat , que ni si quiera puede atender los
pagos de las becas de comedor ya comprometidas.
Moliner no se plantea un plan como el de Rus para garantizar una comida diaria
La Diputación de
Castelló no se plantea una iniciativa como la impulsada en Valencia para
garantizar una comida al día a los niños con riesgos de desnutrición en
los meses estivales en que no hay comedor escolar. Desde la entidad
castellonense afirman que ningún colectivo o ayuntamiento ha pedido que
actuar en ese sentido.
El programa de ayudas de
la Diputación de Valencia está destinado a niños de tres a doce años y
abarcará los 65 días laborales que hay desde el 1 de julio al 30 de
septiembre. El objetivo es proporcionar una comida diaria a 2.325 niños.
El precio del menú será de 3,30 euros y la diputación podrá hacer
frente a un total de 151.151 comidas. Serán los ayuntamientos los
responsables de organizar la dispensación de las comidas en función de
las circunstancias y las disponibilidades del municipio. Desde el PSPV
piden a Moliner que emule a Rus.
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