Tras la interrupción del servicio eléctrico, que dejó el lunes por la noche a oscuras a casi toda Venezuela, el presidente Nicolás Maduro dio a conocer que puso a las fuerzas de seguridad en estado de alerta para amparar a los ciudadanos ante posibles ataques de sabotaje.
Desde el Palacio de Miraflores, el mandatario venezolano afirmó que la medida fue adoptada en el marco de contrarrestar los eventuales ataques de la oposición, pues consideró que la derecha está detrás de un plan desestabilizador en contra del país, que incluye una guerra tanto económica como eléctrica.
El apagón, que dejó a gran parte de Venezuela en penumbras, surgió en vísperas de de los comicios municipales, que se celebrarán el 8 de diciembre.
Maduro aseguró que la falla eléctrica fue ejecutada por la derecha opositora, que mediante este tipo de planes, busca desestabilizar este Estado latinoamericano.
Maduro agregó que el Ejecutivo cuenta con la eficacia y la habilitad necesarias para neutralizar cualquier campaña desestabilizadora que ponga en marcha la oposición.
Como colofón, el jefe de Estado venezolano recordó que más de casi dos mil megavatios fueron inyectados los últimos siete meses al sistema eléctrico nacional con el objetivo de garantizar la energía al pueblo venezolano.
Al respecto, el ministro venezolano para la Energía Eléctrica, Jesse Chacón, sostuvo que el suministro de electricidad se está restableciendo poco a poco en todo el país. “Esperamos que al final de la noche se solvente en su totalidad la falla luego de haber recuperado en completamente la línea 765, donde se originó el evento”, acotó.
OTRA HUMANIDAD ES NECESARIA
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