"Gracias por venir y por el interés que, lo
poco que pude ver en Miami, vi que se había armado mucho revuelo". Así
ha comenzado Fernando Madina la rueda de prensa en la que explica los
terroríficos días que ha vivido en Miami.
El líder de Reincidentes explica que todo empezó en el aeropuerto de Miami, en el que se encontraba con su grupo para dirigirse a Quito a dar un concierto, y a la hora de embarcar un policía le detiene y le dice que "los demás sí pero yo no puedo entrar porque huelo a alcohol". Le llevó a una sala de detenciones y, Madina asegura que intentó apelar a su humanidad manifestando a la persona que le retenía que él y su banda viven de su música, y por lo tanto también sus familias, y que por favor le deje embarcar. La respuesta fue clara: "Me dijo que nuestras familias le importaban un pito".
Fernando continúa su declaración: "Me da el calentón y le digo que está loco, que es una persona ruin y que es una injusticia. Con el momento de cabreo tiro al suelo mi bolsa de mano y hago el gesto de que está loco. En seguida noto que me esposan y me empujan sin mi equipaje. Llego a un centro de detención del aeropuerto y me creo que me van a soltar. Me dan mi bolsa, saco el móvil para llamar a mi mujer, pero no tenía batería, así que cuando voy a volver a meter el móvil me vuelven a esposar y empujar a un furgón. Me llevan a una cárcel
El líder de Reincidentes relata que una vez en el centro penitenciario pasó la noche en una celda sin ningún tipo de información y hasta la mañana siguiente no le trasladaron a una zona habilitada para juicios rápidos por videoconferencia. Tras un proceso que, tal y como ha contado Madina, suscitó el enfado de los carcelarios, devuelven a la cárcel, "a palos", a todos los detenidos, y le visten "con el clásico mono naranja que todos hemos visto en neustros televisores en los presos de Guantánamo".
Desde el sábado hasta el lunes por la mañana permanece preso, horas que se le hicieron interminables y cuya experiencia califica de vejatoria, "casi hasta el punto de quebrarme, pero allí no podía, si lo hacía estaba perdido". "Las horas pasaban despacio, la comida no se puedía comer, la celdas eran muy pequeñas, no daban mantas, no daban almohadas, hacía frío. Y el único papel que me habían dado fue el número de preso", continúa Madina.
El lunes le llevaron delante de un juez, y por fin alguien le dirige la
palabra, "los primeros buenos días que alguien me dirige en tres días".
El juez leyó la acusación y le pidió que se explicara, y tras la
declaración de Fernando de todo lo acontecido, el juez le contestó:
"Este caso queda anulado, por lo tanto no hay caso, y le felicito desde
esta corte por tener 47 años y tener una banda de rock". El líder de
Reincidentes bromea durante la rueda de prensa comentando que en ese
momento pensó: "Anda que si llega a ver a Rosendo…".
Lejos de haber terminado su horrible periplo, Fernando vuelve al centro penitenciario y pasa varias horas en una celda "junto a un e esquizofrénico dominicano". Asegura que le dejaron jugar al baloncesto mientras esperaba y entonces fue trasladado a una zona donde llevaban a aquellos que van a soltar. "Allí me devuelven mis cosas, que por cierto faltaba la cartera con todas mis tarjetas, incluso la tarjeta de Mercadona".
Fernando Madina se ha referido a Estados Unidos con palabras punzantes e incisivas: "EEUU además de ser los reyes del miedo son los reyes del capitalismo. Tienen ese concepto de autodefensa que les lleva a una especie de paranoia colectiva y les hace que cuando tú pasas por su país te conviertes en un sospechoso, y si te detienen, eres una escoria. Allí eres culpable hasta que se demuestre lo contrario. El sistema democrático no sirve para nada".
Antes de sus declaraciones, los otros miembros de Reincidentes han relatado su vivencia desde fuera: "Quiero incidir en el tema de la tortura que [también] es no saber dónde está una persona y les preguntas y no te dan respuesta, te dicen que ellos no saben nada". Añaden que una vez terminada "la pesadilla", tuvieron que coger un avión a Madrid haciendo escala en Berlín, y en el aeropuerto alemán volvieron a parar a Fernando Madina, "pero la policía se portó muy bien y pudimos llegar a tiempo para coger el avión a Madrid".
RECIENTE ENTREVISTA DE LA HAINE A REINCIDENTES http://www.lahaine.org/index.php?p=73371
OTRA HUMANIDAD ES NECESARIA
El líder de Reincidentes explica que todo empezó en el aeropuerto de Miami, en el que se encontraba con su grupo para dirigirse a Quito a dar un concierto, y a la hora de embarcar un policía le detiene y le dice que "los demás sí pero yo no puedo entrar porque huelo a alcohol". Le llevó a una sala de detenciones y, Madina asegura que intentó apelar a su humanidad manifestando a la persona que le retenía que él y su banda viven de su música, y por lo tanto también sus familias, y que por favor le deje embarcar. La respuesta fue clara: "Me dijo que nuestras familias le importaban un pito".
Fernando continúa su declaración: "Me da el calentón y le digo que está loco, que es una persona ruin y que es una injusticia. Con el momento de cabreo tiro al suelo mi bolsa de mano y hago el gesto de que está loco. En seguida noto que me esposan y me empujan sin mi equipaje. Llego a un centro de detención del aeropuerto y me creo que me van a soltar. Me dan mi bolsa, saco el móvil para llamar a mi mujer, pero no tenía batería, así que cuando voy a volver a meter el móvil me vuelven a esposar y empujar a un furgón. Me llevan a una cárcel
El líder de Reincidentes relata que una vez en el centro penitenciario pasó la noche en una celda sin ningún tipo de información y hasta la mañana siguiente no le trasladaron a una zona habilitada para juicios rápidos por videoconferencia. Tras un proceso que, tal y como ha contado Madina, suscitó el enfado de los carcelarios, devuelven a la cárcel, "a palos", a todos los detenidos, y le visten "con el clásico mono naranja que todos hemos visto en neustros televisores en los presos de Guantánamo".
Desde el sábado hasta el lunes por la mañana permanece preso, horas que se le hicieron interminables y cuya experiencia califica de vejatoria, "casi hasta el punto de quebrarme, pero allí no podía, si lo hacía estaba perdido". "Las horas pasaban despacio, la comida no se puedía comer, la celdas eran muy pequeñas, no daban mantas, no daban almohadas, hacía frío. Y el único papel que me habían dado fue el número de preso", continúa Madina.
El lunes le llevaron delante de un juez, y por fin alguien le dirige la
palabra, "los primeros buenos días que alguien me dirige en tres días".
El juez leyó la acusación y le pidió que se explicara, y tras la
declaración de Fernando de todo lo acontecido, el juez le contestó:
"Este caso queda anulado, por lo tanto no hay caso, y le felicito desde
esta corte por tener 47 años y tener una banda de rock". El líder de
Reincidentes bromea durante la rueda de prensa comentando que en ese
momento pensó: "Anda que si llega a ver a Rosendo…".Lejos de haber terminado su horrible periplo, Fernando vuelve al centro penitenciario y pasa varias horas en una celda "junto a un e esquizofrénico dominicano". Asegura que le dejaron jugar al baloncesto mientras esperaba y entonces fue trasladado a una zona donde llevaban a aquellos que van a soltar. "Allí me devuelven mis cosas, que por cierto faltaba la cartera con todas mis tarjetas, incluso la tarjeta de Mercadona".
Fernando Madina se ha referido a Estados Unidos con palabras punzantes e incisivas: "EEUU además de ser los reyes del miedo son los reyes del capitalismo. Tienen ese concepto de autodefensa que les lleva a una especie de paranoia colectiva y les hace que cuando tú pasas por su país te conviertes en un sospechoso, y si te detienen, eres una escoria. Allí eres culpable hasta que se demuestre lo contrario. El sistema democrático no sirve para nada".
Antes de sus declaraciones, los otros miembros de Reincidentes han relatado su vivencia desde fuera: "Quiero incidir en el tema de la tortura que [también] es no saber dónde está una persona y les preguntas y no te dan respuesta, te dicen que ellos no saben nada". Añaden que una vez terminada "la pesadilla", tuvieron que coger un avión a Madrid haciendo escala en Berlín, y en el aeropuerto alemán volvieron a parar a Fernando Madina, "pero la policía se portó muy bien y pudimos llegar a tiempo para coger el avión a Madrid".
RECIENTE ENTREVISTA DE LA HAINE A REINCIDENTES http://www.lahaine.org/index.php?p=73371
OTRA HUMANIDAD ES NECESARIA
No hay comentarios:
Publicar un comentario