Ruíz-Mateos, la excepción a los desahucios: mantiene sus 40 casas un año después del embargo Destacado
Hace ya un año -en algunos casos incluso hasta dos- que se dictaron
órdenes de embargo sobre más de 40 propiedades, pero desde entonces no
se ha podido materializar ni un sólo proceso de lanzamiento.
Los
Ruiz-Mateos mantienen sus residencias particulares, incluidas las
segundas viviendas en la costa de Andalucía y la Comunidad Valenciana,
con una tranquilidad absoluta. José María Ruiz-Mateos, el patriarca del
clan, sigue viviendo junto a su mujer, Teresa Rivero, en la mansión de
la lujosa urbanización madrileña de Somosaguas.
Y
eso que sobre la casa pesan dos ejecuciones hipotecarias dictadas por
los juzgados de primera instancia de Pozuelo y una anotación de embargo
del juzgado de instrucción número 45 de la Audiencia Nacional. La casa
está sujeta a una hipoteca de Fortis Bank (BNP) por un importe de 3,13
millones de euros, a la que hay que añadir una segunda por valor de
otros 438.000 euros.
"Los
Ruiz-Mateos llevan mucho tiempo sin pagar y lo normal es que después de
las órdenes de embargo, en un plazo aproximado de seis meses se
hubieran iniciado los proceso de deshaucio, pero no ha habido nada de
nada y tanto ellos como sus hijos siguen viviendo en sus viviendas con
total tranquilidad", asegura Joaquín Yvancos, abogado de la familia durante cerca de 30 años.
Pero
Fortis no es el único afectado. Sobre las propiedades del fundador de
Rumasa y de sus hijos pesan también órdenes de embargo desde hace tiempo
por parte de Santander, BBVA, La Caixa o Cajasur (BBK), entre otras
entidades y, sin que, hasta ahora, ninguna de ellas haya podido llevar a
cabo una ejecución.
Objetivo: ganar tiempo
Una
de las entidades en proceso de embargo, que prefiere mantener el
anonimato, ha reconocido a elEconomista que los procesos son muy
complicados porque la familia Ruiz-Mateos utiliza todo tipo de
"triquiñuelas legales" para dilatarlos en el tiempo. "Han cambiado
cuatro veces de abogado y cuando hay una cita judicial no se presentan;
pero es que además todas las propiedades inmobiliarias están a nombre de
sociedades interpuestas y no de personas físicas, con lo que es mucho
más difícil la ejecución hipotecaria", aseguran. Y por si fuera poco,
las entidades financieras que sufren los impagos tienen que enfrentarse
además para poder cobrar a órdenes de embargo dictadas también por la
Administración Tributaria, la Seguridad Social o la Audiencia Nacional,
entre otros organismos. "La familia no paga, entre otras razones, porque
al estar las casas embargadas ya por la justicia para hacer frente a la
deuda con los acreedores, saben que todo el dinero que adelanten irá a
parar a esto. No es lo mismo que la justicia se quede una casa libre de
cargas a una con una hipoteca de 3,5 millones", explica Yvancos.
La familia Ruiz-Mateos tiene que hacer frente a dos grandes procesos de embargo judiciales. En
enero, el juez de la la Audiencia Nacional Pablo Ruz dictó el embargo
de 220 propiedades, incluyendo casas, coches de alta gama y joyas- para
hacer frente a una deuda con los acreedores de 290 millones de euros. Pero
es que en marzo, el juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid ordenó
también un embargo preventivo absolutamente récord en la historia
empresarial española. Se elevaba a un importe de 681,02 millones de
euros e iba dirigido contra José María Ruiz Mateos y sus hijos José
María, Álvaro y Francisco Javier. En teoría, ninguno de ellos puede
disponer desde ese momento de sus bienes y derechos hasta que no cubran
el agujero patrimonial que dejaron en Clesa, pero en la práctica la
situación es muy distinta.
"Se encadenarán a la casa"
"Es
probable que antes de perder su casa o cualquier propiedad, Ruiz-Mateos
montara otro numerito y se encadenara a la verja", aseguran desde uno
de los bancos que le ha embargado. Las entidades financieras insisten,
no obstante, en que aunque el polémico empresario jerezano intente
burlar otra vez a la justicia, "antes o después tendrá que pagar sus
deudas y será desahuciado por impago".
OTRA HUMANIDAD ES NECESARIA
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