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jueves, 9 de agosto de 2012

IRAN Y PAQUISTAN PIDEN UNA SOLUCION DIPLOMATICA PARA SIRIA






El presidente de la República Islámica de Irán, Mahmud Ahmadineyad, ha mantenido este miércoles una reunión en Teherán, capital iraní, con Soqra Imam, la enviada especial del presidente paquistaní. En dicho encuentro, ambas partes han insistido en adoptar una salida diplomática para la actual crisis política que vive Siria.

Ahmadineyad ha considerado, por su parte, que tanto la reunión de consultas sobre Siria, a celebrarse mañana, jueves, en Teherán, como la sesión extraordinaria de los líderes de los países islámicos prevista para los próximos días 14 y 15 de agosto en la ciudad sagrada de La Meca, Arabia Saudí, constituyen oportunidades adecuadas para presentar iniciativas diplomáticas que deriven en una solución para el caso sirio.

Asimismo, el mandatario persa ha advertido de que armar a los terroristas en Siria y permitir la injerencia de “algunos países de la región” en territorio sirio, empeorará la situación en el país árabe.

Ahmadineyad, además, ha enfatizado la visión política que Irán y Paquistán comparten acerca del respeto de los derechos y libertades del pueblo sirio.

“En ningún país del mundo, la democracia se establecerá mediante guerra y masacre”, ha aseverado.

Por su parte, la funcionaria paquistaní ha respaldado una solución diplomática surgida de la demanda popular para solventar la crisis siria.

“Paquistán respeta la integridad territorial, así como la soberanía e independencia de Siria, y hace énfasis en el principio de no intervención de otros países en un país”, ha agregado Imam.

Igualmente, ha puesto de manifiesto el rechazo de Islamabad a cualquier ejercicio de fuerza e intervención militar en los países del mundo, a la vez que ha urgido a acabar con todas aquellas cuestiones que suscitan discrepancias entre los países del Mundo Islámico.

Los países occidentales, encabezados por Estados Unidos, han unido esfuerzos para llevar a cabo un cambio de política en Siria, al acusar el gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad, de matar a los opositores y adoptar medidas violentas contra la población.

Sin embargo, Damasco, por su parte, denuncia la injerencia extranjera en su territorio a través del apoyo financiero y militar de los mismos países occidentales y sus aliados en la región, que arman y financian a los grupos armados. 
OTRA HUMANIDAD ES NECESARIA 

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