.La policía local de Madrid sigue con su peligrosa deriva violenta y represiva hasta el punto de que ayer acabó deteniendo a un mantero de Lavapiés pistola en mano y disparando al aire. Con los disparos el agente supuestamente quería dispersar a los compañeros del mantero detenido cerca de las dos de la tarde a la altura de la calle Amparo, cuando la polícia inmovilizaba en el suelo a un hombre.
Dos de los manteros consiguieron escapar y volvieron sobre sus pasos para increpar a los agentes que seguían reteniendo a su compañero. El inmigrante comenzó a gritar, alertando a los otros muchos subsaharianos . De una plaza que comunica Amparo con la paralela Mesón de Paredes, alertados por los gritos del hombre, aparecieron decenas de extranjeros y españoles a auxiliar al detenido. Uno de los agentes reaccionó golpeando con su porra al extranjero que había dado la voz de alarma. A este, los golpes no hicieron otra cosa que enfurecerle más todavía. Continuó gritando y arrojó una de las zapatillas deportivas que calzaba al funcionario que lo había aporreado.
Otro funcionario de la secreta, ataviado con una camiseta de los Boston Celtics, mientras tiraba del detenido calle Amparo arriba, sacó su pistola y comenzó a apuntar a los africanos. Finalmente, abrió fuego provocando el pánico general. Se da la circunstancia de que la calle Amparo es muy estrecha y los balcones de las casas apenas distan unos diez metros de la calle, donde el agente disparaba. No hubo más disparos que los del policía
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