por Hersh Zakheim
03 de Marzo de 2014
La clase media fascista occidental Ucraniana, tiene un sueño
tonto. Pasar del dudoso capitalismo del Este, al moribundo capitalismo
occidental. Y entonces participan, como punta de lanza del ataque,
siguiendo el guion de las “revoluciones” de colores.
Inventando un nacionalismo, inexistente en la realidad, dado que no pueden ser nacionalistas sanos, los burgueses que sueñan primero con su dinero y luego con la patria. Y así acaban, apenas en el fascismo, para defender sus propiedades.
Y aprovechando las incapacidades, de otro oligarca ladrón como Yanukovich, no menos repugnante que los “revoltosos “de Kiev , se han prestado ahora, a las necesidades del viejo Capitalismo Occidental, sirviéndole como punta de lanza, para cumplir objetivos de la OTAN y del Capital internacional, que van más allá de la propia Ucrania.
Y ese objetivo, está dentro de la lógica del capital… crecer comiéndose a la competencia.
Está en los genes del viejo capitalismo occidental, tratar de engullir al nuevo y dudoso capitalismo del Este. Entiéndase desde luego a Rusia, como cuerpo de la criatura.
Las razones son varias, en primer lugar, la inmensa y apetecible riqueza energética y territorial de Rusia, luego la sospecha, de que de las debilidades e improvisaciones del capitalismo Ruso, puedan resultar en el tiempo, en la restauración del socialismo.
Recordemos que Rusia, no tiene asentada todavía, la nueva e improvisada clase media, imprescindible para la sustentación del Capitalismo, y aun está fresca en la mayoría de su población, la memoria de la igualdad económica, que existía en los tiempos de la URSS.
Pero como siempre, una cosa son los deseos y otro las realidades.
El nuevo capitalismo Ruso, y su superior misilistica nuclear, es demasiado poderoso, para que el viejo capitalismo occidental, pueda jugar a la revolución de colores en Ucrania con éxito.
Ya lo habíamos advertido en http://www.kaosenlared.net/secciones/s2/opinion/item/68360
Es absolutamente lógico y estratégico, que Rusia bajo ningún concepto, va a permitir que Ucrania caiga en las manos de la OTAN.
Las denominaciones de la prensa y medios Occidentales, llamando “gobierno” a los asaltantes de Kiev, no tiene valor alguno. Recordemos que para Washington, ni Chávez antes ni Maduro hoy, eran presidente legítimos de Venezuela, y si Carmona por ejemplo.
En Venezuela hasta ahora, la otra “Revolución naranja” en escena, que impulsa USA, a través de la oligarquía cipaya, apoyada en la clase media, no tiene sustento suficiente, porque gracias al Comandante Chaves, el rojo se traga al naranja en la gama de colores.
Afectuosamente
Hersh Za
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