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jueves, 20 de febrero de 2014

ÚLTIMAS NOTICIAS SOBRE EL GOLPE DE ESTADO ORQUESTADO EN UCRANIA POR LA U.E Y EE.UU.



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  • Los opositores al gobierno Ucraniano de la plaza Maidan desfilan por las calles de Kiev al grito de ¡Sieg Heil!

  • Según los estudios sociológicos, un 56-57% de la población está categóricamente en contra de lo que está ocurriendo en Maidán.

  • Un edificio del Servicio de Seguridad de Ucrania ha sido asaltado y han desaparecido 268 pistolas, 2 fusiles, 3 metralletas, 92 granadas y 15 mil cartuchos de munición.


En Ucrania se ha creado una situación de miedo. En la voz del embajador de los EEUU en Ucrania, Geoffrey R. Pyatt, se dejaron sentir notas de pánico. Es difícil saber de qué tiene miedo exactamente el diplomático norteamericano; ¿De la pérdida definitiva del país?
Como un conjuro repite el embajador el mantra sobre la suspensión de inversiones y la ruptura democrática, que desgarrará a Ucrania en pedazos si no se detiene, si no se impide con rapidez. Según sus palabras lo importante ahora es detener la violencia en el país, esclarecer los crímenes y llevar a los culpables ante la justicia.
¿Sobre qué culpables y de qué violencia habla, a quién exige detener el embajador norteamericano, quien por lo visto mira los acontecimientos en Kiev a través de unas gafas de ciego?
Al mismo tiempo que el embajador, el “mundo civilizado” no vio con que salvajismo y sadismo se emplean los nazis de Maidán al grito ¡Sieg Heil!, ¡Rudolf He!, ¡Hitlerjugend-SS!, cómo molieron a palos con sus bates y palas de zapador a los kievianos que salieron voluntarios a despejar las barricadas en la calle Kreschatik.
Tampoco quisieron ver como esas bandas de encapuchados envilecidos de odio, linchaban a unos policías indefensos que se encontraban cerca del ayuntamiento que se supone habían abandonado.
Tampoco prestaron atención, el embajador y los que hablan como él, a lo agentes del orden, que llegaban al hospital heridos de gravedad, con conmoción cerebral, con uñas arrancadas, dedos rotos, riñones reventados…
Uno de los asesinados en Kiev es un ingeniero informático de 57 años, quien al intentar impedir que arrasasen con los servidores y ordenadores de una sede institucional, recibió una paliza de muerte.
Toda esa noche del domingo al lunes, junto al edificio de la sede consistorial de Kiev, camparon a sus anchas, enfurecidos, los “caballeros revolucionarios”, combatientes de una extraña organización que se autodenomina “Narnia-vikingos”, quienes supuestamente estaban restaurando la justicia y el orden, “devolviendo al pueblo” el “látigo revolucionario” que le habían arrebatado. Incluso las expresiones que usan dan buena cuenta de la oscuridad total que reina en sus cabezas.
Mientras el embajador norteamericano vuelve a expresar su inquietud por la adopción de medidas de fuerza durante los actos “pacíficos” de protesta, o por la desaparición y secuestros de personas, en Maidán continúan atrincherándose elementos radicales no solo de Ucrania, también del Cáucaso. No solo hay más combatientes radicalizados, también hay más explosivos, más armas. Por las calles de Kiev, desfilan divisiones enteras de paramilitares, armados con palas quitahielos.
El gobierno demuestra su absoluta incapacidad, poniendo en libertad, a cambio de insignificantes concesiones, a auténticos criminales sádicos, que pasan a engrosar automáticamente las filas de los paramilitares. Tampoco parece dispuesto a oír la voz de la mayoría de los habitantes de Ucrania. Según los estudios sociológicos, un 56-57% de la población está categóricamente en contra de lo que está ocurriendo en Maidán. También está cayendo el índice de aceptación de los líderes de la oposición “maidanista”.
Mientras Maidán acumula agresiones, la pseudo oposición comienza el “baile” en torno a la Constitución y la formación de un nuevo Consejo de ministros para traer arrastras las competencias de unos clanes oligárquicos, que son los que se encuentran ahora en el poder, al terreno de los otros, que perdieron ese poder e intentan ahora tomarse la revancha.

Robo de armas y munición

Del edificio sede del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) en la región de Ivano-Frankovsk los asaltantes se llevaron armas y munición.
Según declaraciones del vicedirector del SBU, Vladímir Porodko, han desaparecido 268 pistolas, 2 fusiles, 3 metralletas, 92 granadas y 15 mil cartuchos de munición.
En un encuentro con embajadores extranjeros, Porodko, anunció que el SBU tras el recrudecimiento de los desórdenes en Kiev, se encuentra en estado de máxima alerta. Se están adoptando medidas adicionales para garantizar la seguridad del Estado, el orden público y la defensa de las fronteras nacionales.

Asalto al edificio del Consejo nacional de radio y televisión

Hoy 19 de febrero, los “manifestantes” han ocupado en el centro de Kiev el edificio del Consejo nacional de radio y televisión.
Los asaltantes de Maidán, informaron a los trabajadores que se encontraban en las instalaciones, que tienen pensado organizar allí un hospital para los heridos. Sin embargo, según declaraciones de testigos, no han llevado allí a ningún herido.
Mientras, los activistas están introduciendo en las instalaciones cajas de aspecto sospechoso en las que no se descarta que en lugar de medicamentos se almacene munición. Los ocupantes del edificio, exigen de la dirección que les entreguen las llaves de todos los despachos.
Las personas que trabajan allí están muy asustadas. Nadie de los ocupantes explica quiénes son y qué persiguen con sus actos.

Leonid Kaláshnikov: Los acontecimientos de Kiev recuerdan al comienzo de los conflictos en Bosnia, Siria o Libia

Va a ser difícil que el presidente de Ucrania Víktor Yanukóvich vaya a poder reconducir  por la vía pacífica la situación en Kiev, aunque sigue habiendo una posibilidad, considera el vicesecretario  para relaciones exteriores de la Duma, Leonid Kaláshnikov (PCFR).
“Yanukóvich llega tarde, por supuesto, pero todavía tiene posibilidad de imponer el orden, por cuanto por su parte fueron respetados todos los acuerdos, mientras que los líderes de la oposición han demostrado que no pueden controlar a los manifestantes”.
“Tengamos la opinión que tengamos sobre Yanukóvich,- a mí no me simpatiza-, fue elegido por la mayoría y sus oponentes deben luchar con él con métodos legales”.
“En Sarajevo, en Siria, en Libia todo comenzó a raíz de provocaciones. En Kiev estamos viendo lo mismo ahora. Acontecimientos como estos eran fáciles de vaticinar”. Al menos todo estaba orientado a que se diesen provocaciones. Cuando liberaron a los últimos autodenominados “presos políticos” y se acordó limpiar todas las calles y abandonar los edificios ocupados de la capital de Ucrania, era evidente que se iban a producir provocaciones, al menos para mí”.
Al mismo tiempo Kaláshnikov considera una equivocación las esperanzas de los dirigentes ucranianos de conseguir una solución fácil, menos ahora que la plaza ya repudia a sus líderes, Yatseniuk y Klichkó.
“Una situación parecida se dio con la llegada de Hitler en Alemania. De convocarse ahora elecciones, el partido “Svoboda” obtendría aún un mayor número de votos, y podría fácilmente formar coalición con UDAR, y entonces sí que veríamos lo que es bueno…mientras que el gobierno va seguir diciendo que “no se esperaba esto”.
El silencio de Europa sobre la actuación de “Svoboda” en Kiev se explica, porque a los europeos les interesa más conseguir como vecino a un país dividido y debilitado, que defender de verdad los derechos humanos. La Yugoslavia dividida es un buen ejemplo de ello, afirmó Kaláshnikov.

Ziugánov: En Ucrania es imprescindible organizar destacamentos de autodefensa para enfrentar a las bandas de “Banderistas”.

En declaraciones a la emisora RSN, el líder comunista ruso manifestó:
“Estamos colaborando activamente con el líder del Partido Comunista de Ucrania, Piotr Simonenko y llamando a toda la Ucrania oriental, central y del sur a formar destacamentos de autodefensa, para enfrentar a las bandas de “banderistas”. Ucrania para nosotros es una prioridad, al igual que Bielorrusia: Tenemos lazos familiares, una industria aeronáutica común.
A su vez el presidente del PCFR, G. Ziugánov ha hecho un llamado para sustituir al embajador ruso en Ucrania, Zurábov: “No ve nada, no oye nada, mientras el embajador norteamericano está dirigiendo a toda esa jauría”.
Ziugánov señaló que mantener los actos de protesta en Maidán tiene un presupuesto de un millón de dólares al día.
Finalmente Ziugánov recordó la declaración de la Duma en la que se dice que se necesita una ayuda más concreta, eficaz y activa al gobierno de Ucrania.

OTRA HUMANIDAD ES NECESARIA

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