martes, 11 de febrero de 2014
Pese a todos los
disparates que comete en su programa matinal, TVE sigue apostando por la
ex esposa del periodista-policía Carlos Herrera, que en cierta ocasión
mostrara a los televidentes una transparencia, tras la cual se le veía
un tanga de color negro (sería un "despiste") Es lógico que sigan
manteniendo a esta yegua burguesa: por desgracia España es un país donde
vuelve a crecer el analfabetismo y existen millones de analfabetos
funcionales.
Mariló Montero acumula
casi una polémica por semana. Su espontaneidad le jugó esta mañana una
nueva pasada cuando confundió el río Miño a su paso por Ourense con el
Nilo. Después de comentar los estilismo de los premios Goya, Mariló
Montero dio paso a una de las reporteras para informar sobre el
temporal.
«Tengo a mi compañera en
un río, en el Nilo» afirmó Mariló Montero. El caso es que incluso
repitió varias veces su lapsus («¿estás por ahí, en el Nilo?»),
insistió. Fue la reportera, que se encontraba en Velle (Ourense) a las
orillas del Miño, la que corrigió a Mariló Montero y le advirtió de que
se trataba del Miño y no del Nilo.
Mariló Montero argumentó
que este fin de semana había visto un documental sobre el Nilo en La 2 y
que hacía un rato lo había comentado con una de sus compañeras en plató
y de ahí el error.
El caso es que Mariló
Montero ya había conectado en al menos una ocasión con la reportera que
se encontraba en el Miño, e incluso se sorprendió de las «olas» que
había en la orilla. De hecho la reportera, provista con un traje de
aguas, se introdujo hasta casi la cintura en la zona inundada del paseo
fluvial para hacer desde allí la conexión. Hasta que al final el agua
provocó que se quedase sin sonido.
Algo que recordaba otro
episodio que despertó gran polémica cuando otro equipo del programa hizo
una conexión desde el cauce crecido del río Pisuerga a su paso por
Valladolid.
Las pifias de Mariló Montero
Mariló Montero, que
cuenta con un número de detractores similar al de defensores, tiene en
su haber un buen número de meteduras de pata, con más o menos intención.
La última fue hace unos días, cuando preguntó si los calamares del
Museo del Calamar arrasado por el temporal en Luarca estaban vivos, una
cuestión que dejó casi sin palabras a su presidente.
Por San Antón Mariló
Montero contó en el plató con una curiosa mascota, un cerdo, al que ante
la mirada atónita de su dueña le dijo: «está para comérselo, pero
literal». Y siguió: «Brontos, yo tengo un problema. Soy navarra y estoy
acostumbrada a ver a los cochinillos aplastados o muy churruscados».
La presentadora del
programa de La mañana de la 1 fue reconocida a principios de año con un
premio Gerardo, en la categoría de peor presentadora de televisión.
Uno de los mayores
revuelos los causó cuando en la recta final del programa, en el espacio
dedicado a la cocina. A la presentadora de La Mañana de La 1 le ha
jugado una mala pasada las transparencias, la iluminación y un atuendo
atrevido. La conjunción de estos tres factores destaparon el tanga negro
de Mariló Montero.
La Voz de Galicia
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