06.01.2014
“Conoceréis la Verdad, y ésta os hará libres”. Así reza una promesa de Jesús de Nazaret en plena lucha contra el imperio romano. El imperio de nuestro tiempo sabe que dominando la verdad, logrará continuar con el sometimiento global. Con la derrota al imperio nazi, el nuevo imperio se apropió de sus estrategias comunicacionales.
El núcleo fascista de la propuesta comunicacional era y es: la mentira tiene que ser tan grande para que sea creíble. Otra era y es: una mentira dicha mil veces se convierte en verdad. El Reich nazi bombardeó una ciudad alemana fronteriza con Francia; y acusó a ese país. Así tuvo la excusa para invadir Francia. Este hecho histórico es solo un ejemplo de ese tiempo.
El evento de las Torres Gemelas del 11 de septiembre de 2001 ha marcado una nueva pauta a la humanidad. ¿Cuántos eventos se han suscitado en el mundo por el control político global desde ese evento matriz? ¿Cuál fue la verdad verdadera del evento matriz? Los medios de comunicación bailaron pegado con la política imperial. Ese baile no ha terminado.
El Estado imperial se vale de los medios de comunicación para repetir sus engaños (porciones de verdad y mentira). Los adversarios de la verdad son la mentira y el engaño. Estos enemigos conducen a la muerte moral y física del ser humano. Ellos pueden destruir a cualquier político con buenas intenciones. Lo vivimos en carne propia en nuestro país. Ellos declaran la guerra contra pueblos inocentes. Podemos ver cómo están hoy en día algunos países en el Medio Oriente.
El Estado imperial ha caído en su propia trampa psicológica. Al ser el propulsor de la anti ética mundial, se sabe culpable y desconfía de sus aliados. Se siente solo. Es por ello, que espía a toda la humanidad. Cualquiera puede ser un terrorista. El Papa Francisco puede ser un terrorista si atenta contra el interés imperial. Un niño puede ser un terrorista si decide públicamente no comer en Mc Donald. Todo el que tenga algo de ética es un terrorista.
Julian Assange, Edward Snowden, el sargento Manning, entre otros, lograron superar las barreras del temor al sistema imperial. Se han jugado sus vidas y la de sus familias por dar a conocer la verdad en torno a los mecanismos de dominación global. Nuestro mundo cobarde e ingrato aun no valora sus aportes, los cuales denuncian los planes bélicos, el control social de los pueblos y los daños ecológicos al planeta. Pareciera que los movimientos sociales y ecológicos a escala mundial no valoraran el sacrificio por la ética que han realizado estos héroes. Hasta ahora nosotros seguimos bailando pegado con la política imperial. Pero es hora de reaccionar a favor de esos héroes mundiales. El año 2014 debe ser el año de la nueva Ética, la verdad nos hará libres e iguales. Digámosle: No al terrorismo del Imperialismo del siglo XXI.
tubalcainp@gmail.com
Fuente: http://www.aporrea.org/tiburon/a179480.html
“Conoceréis la Verdad, y ésta os hará libres”. Así reza una promesa de Jesús de Nazaret en plena lucha contra el imperio romano. El imperio de nuestro tiempo sabe que dominando la verdad, logrará continuar con el sometimiento global. Con la derrota al imperio nazi, el nuevo imperio se apropió de sus estrategias comunicacionales.
El núcleo fascista de la propuesta comunicacional era y es: la mentira tiene que ser tan grande para que sea creíble. Otra era y es: una mentira dicha mil veces se convierte en verdad. El Reich nazi bombardeó una ciudad alemana fronteriza con Francia; y acusó a ese país. Así tuvo la excusa para invadir Francia. Este hecho histórico es solo un ejemplo de ese tiempo.
El evento de las Torres Gemelas del 11 de septiembre de 2001 ha marcado una nueva pauta a la humanidad. ¿Cuántos eventos se han suscitado en el mundo por el control político global desde ese evento matriz? ¿Cuál fue la verdad verdadera del evento matriz? Los medios de comunicación bailaron pegado con la política imperial. Ese baile no ha terminado.
El Estado imperial se vale de los medios de comunicación para repetir sus engaños (porciones de verdad y mentira). Los adversarios de la verdad son la mentira y el engaño. Estos enemigos conducen a la muerte moral y física del ser humano. Ellos pueden destruir a cualquier político con buenas intenciones. Lo vivimos en carne propia en nuestro país. Ellos declaran la guerra contra pueblos inocentes. Podemos ver cómo están hoy en día algunos países en el Medio Oriente.
El Estado imperial ha caído en su propia trampa psicológica. Al ser el propulsor de la anti ética mundial, se sabe culpable y desconfía de sus aliados. Se siente solo. Es por ello, que espía a toda la humanidad. Cualquiera puede ser un terrorista. El Papa Francisco puede ser un terrorista si atenta contra el interés imperial. Un niño puede ser un terrorista si decide públicamente no comer en Mc Donald. Todo el que tenga algo de ética es un terrorista.
Julian Assange, Edward Snowden, el sargento Manning, entre otros, lograron superar las barreras del temor al sistema imperial. Se han jugado sus vidas y la de sus familias por dar a conocer la verdad en torno a los mecanismos de dominación global. Nuestro mundo cobarde e ingrato aun no valora sus aportes, los cuales denuncian los planes bélicos, el control social de los pueblos y los daños ecológicos al planeta. Pareciera que los movimientos sociales y ecológicos a escala mundial no valoraran el sacrificio por la ética que han realizado estos héroes. Hasta ahora nosotros seguimos bailando pegado con la política imperial. Pero es hora de reaccionar a favor de esos héroes mundiales. El año 2014 debe ser el año de la nueva Ética, la verdad nos hará libres e iguales. Digámosle: No al terrorismo del Imperialismo del siglo XXI.
tubalcainp@gmail.com
Fuente: http://www.aporrea.org/tiburon/a179480.html
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