martes, 19 de noviembre de 2013
La toma de Qalamún.
El avance realizado la
pasada semana por el Ejército sirio en la región clave de Qalamún, al
norte de Damasco, reviste gran importancia por la posición estratégica
de esta ciudad, cercana a Damasco y a la ciudad vecina de Homs.
Igualmente próxima a la
frontera libanesa, la ciudad de Qalamún, donde se encuentran varios
depósitos de armas, constituye la retaguardia de los grupos armados.
Desde ella, éstos han llevado a cabo intentos de asediar la capital,
Damasco, desde el norte, y controlar la carretera que une Damasco y
Homs.
De este modo, la
reconquista de Al Qalamún ha permitido al Ejército asegurar una
continuidad territorial bajo su control que se extiende entre la
provincia de Damasco y la de Homs.
Qalamún, y su extensión
libanesa, Ersal, se han convertido en el último año en un santuario para
los grupos terroristas. Un gran número de grupos como el Frente al
Nusra, el Estado Islámico de Iraq y Siria, las Brigadas al Furqan, las
Brigadas Suqur al Sham y otros grupos militantes que han huido de los
frentes de la provincia de Damasco se han ido a refugiar allí.
Tras la reconquista de
Qalamun, el Ejército mantiene ahora una ofensiva, en forma de bombardeos
terrestres y aéreos, contra las concentraciones terroristas del Frente
al Nusra y otros grupos en la localidad cercana de Qara, que constituye
un punto de paso fundamental para los militantes en sus desplazamientos.
Según el canal de televisión Al Mayadin el jefe de la milicia del
Ejército Sirio Libre (ESL) en la localidad, Salim Barakat, ha muerto en
los ataques.
Según el corresponsal de
Al Manar, Qara está ahora asediada por los cuatro lados y la única
salida de los militantes es hacia el territorio libanés.
El viernes, las fuerzas
regulares tomaron el control total de la localidad de Muhin, mientras
que el depósito de armas cercano, que fue tomado por los militantes hace
varias semanas, sufre un asedio que impide a estos últimos sacar de él
armas o municiones.
Otro detalle a destacar
es el rechazo de los residentes de Qalamún hacia la presencia de los
grupos militantes, culpables de numerosos saqueos y exacciones así como
otros actos de brutalidad contra la población. Los residentes han pedido
a los combatientes extranjeros que abandonen sus pueblos y a sus
compatriotas que se entreguen y busquen una solución política con las
fuerzas del gobierno. Un gran número de civiles ha huido de estas zonas.
La situación de los
militantes en la región se agravará aún más en las próximas semanas
cuando las previstas nevadas corten casi todas las rutas de
abastecimiento, principalmente las que proceden de Ersal, en el Líbano.
El resto de las vías de comunicación han sido ya cortadas por el
Ejército, tanto por medio de la presencia de sus fuerzas terrestres como
de su artillería.
Al Manar
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