Las principales
universidades públicas de Atenas y Salónica decidieron aplazar hasta la
semana próxima las matriculaciones y el comienzo del curso lectivo en
protesta contra la decisión del Gobierno de colocar a 1.765
administrativos bajo amenaza de despido.
También quedaron postergados los exámenes pendientes, éstos sin fecha concreta.
El Gobierno griego y la llamada Troika
(Banco Central Europeo, Comisión Europea y Fondo Monetario
Internacional) acordaron el paso hasta finales de año de 25.000
empleados públicos a un desempleo subvencionado de ocho meses, durante
el que perciben el 75 por ciento de su salario.
Durante ese periodo los afectados pueden
ser trasladados a otros puestos de trabajo. Los que no puedan ser
recolocados en ese espacio de tiempo, serán despedidos.
El Gobierno tiene previsto anunciar el
próximo día 20 sus planes finales sobre el traslado a la movilidad de
los citados funcionarios.
El rectorado de la Universidad de Atenas
afirmó en un comunicado que la reducción drástica de personal
administrativo y de recursos económicos pone en peligro el
funcionamiento de las universidades griegas.
“Sin exagerar, se puede decir que
estamos ante la peor crisis que ha afrontado jamás nuestra universidad”,
dijo el rector de la Universidad de Atenas, Theodoros Pelegrinis, para
añadir que si se cumplen los planes del Ministerio de Educación, la
universidad dejará de estar en condiciones de operar.
Pelegrinis indicó que los fondos de la Universidad de Atenas ya fueron recortados en un 53 por ciento desde 2009.
También rechazó que haya excedente de
personal y como ejemplo citó que mientras en las universidades griegas
solo hay dos administrativos por cada cien estudiantes, en Estados
Unidos hay 9,5 y en el Reino Unido, 7,9.
Con huelgas comienza también el año
escolar, donde las clases comenzarán regularmente este miércoles, aunque
solo por tres días, pues los sindicatos de los maestros de secundaria
convocaron a una huelga de cinco días para la semana próxima, también en
protesta contra el traslado o excedencia forzosa de profesores.
Las protestas se dirigen además contra
la reforma del sistema de educación secundaria, que prevé, entre otros,
el aumento de las horas lectivas, tanto para estudiantes como para
profesores, así como el número de alumnos por aula.
La convocatoria de huelga, decidida esta
madrugada por los dos sindicatos de docentes de la enseñanza pública,
OLME y ELME, contempla que los paros se realizarán en bloques de cinco
días, a cuyo término se decidirá cada vez si se amplía la protesta.
Los maestros pidieron en una carta
abierta comprensión a los padres y escolares y los invitan a sumarse “a
la lucha por una escuela pública en la que haya lugar para todos los
estudiantes y profesores”,
El ministro de Educación, Konstantinos
Arvanitópulos, aseguró que, pese a las huelgas, el Gobierno no tiene
previsto ordenar la movilización forzosa de los maestros, como había
decidido en junio pasado, en plena época de exámenes de fin de curso,
orden que en ese momento no tuvo que aplicar pues la huelga acabó siendo
levantada.
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