Al Sisi llama a la población a manifestarse el viernes para dar a los militares el mandato para hacer frente a los seguidores del depuesto Mursi. Los disturbios de los dos últimos días dejan al menos 14 muertos
El jefe del Ejército egipcio, Abdelfatá al Sisi, ha llamado este miércoles a manifestaciones en todo el país el viernes para dar a los militares el mandato para hacer frente a los que ha calificado de violencia y terrorismo tras el derrocamiento del presidente electo Mohamed Mursi. En un discurso durante una ceremonia de graduación militar, Al Sisi ha negado las acusaciones de que ha traicionado a Mursi y ha prometido que respetará la hoja de ruta trazada con vistas a la reforma de la Constitución y la celebración de elecciones en el plazo de seis meses.
Según el jefe del Ejército, su llamamiento a manifestarse no es un llamamiento a la violencia y en este sentido ha expresado su respaldo por los esfuerzos en pro de la reconciliación nacional.
En los disturbios de los dos últimos días en El Cairo durante las protestas de seguidores de Mursi han muerto al menos catorce personas y noventa han resultado heridas, según ha informado el Ministerio de Sanidad. El mayor número de víctimas mortales, nueve, se registró en la plaza del Renacimiento durante la madrugada del martes, según un portavoz del citado Ministerio.
Un país dividido
Ayer, los Hermanos Musulmanes, grupo al que perteneció Mursi hasta que accedió a la Presidencia, denunciaron que dos de sus seguidores habían perdido la vida la noche anterior en choques con policías frente a una comisaría, cerca de Rabea al Adauiya.
En cuanto a los heridos, un total de 57 siguen ingresados en hospitales, mientras el resto ha sido dado de alta.
Egipto se halla dividido entre partidarios y opositores a Mursi, que fue depuesto el pasado 3 de julio por el Ejército, tras las protestas multitudinarias de días anteriores que pedían elecciones presidenciales a
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