Etiquetas

domingo, 28 de abril de 2013

25A Y LA NECSIDAD DE UN CAMBIO EN LA PROTESTA

28.04.2013.

Si queremos cambiar la situación no podemos seguir utilizando una y otra vez las estrategias que, hasta ahora, no nos dan resultados.
Como ya es costumbre tras una manifestación, se nos muesta el curioso baile de cifras en los medios (masivos y alternativos) que sitúan el número de manifestantes entre unos pocos cientos hasta unos cuantos miles. Lxs que estuvimos en Neptuno tenemos una cosa clara (aunque haya quien no lo diga) era muy poca gente la que se situaba en frente del ejército de Cristina Cifuentes & cía.
 
En mi opinión, estamos cometiendo tres grandes errores que están determinando el resultado de estas acciones: la transparencia con la que nos organizamos mediante redes sociales y otras herramientas de internet, la falta de líderes y el exceso de ambición en los objetivos.
 
Las redes sociales nos están permitiendo conocer al momento lo que pasa y convocar un gran número de personas casi sin previo aviso pero, al mismo tiempo,  estamos avisando de todos y cada uno de nuestros movimientos al enemigo, hay quien da su localización por GPS para que se sepa dónde está y hay quien incluso transmite por el móvil la manifestación desde dentro, grabando los rostros y los actos de nuestrxs propixs compañerxs. No es que el enemigo se pueda hacer una idea de lo que se va a hacer, es que se lo damos por escrito, no es que tengan que imaginar lo que no pueden ver, es que se lo grabamos en vídeo y mostramos en directo. Sabemos que el enemigo no destaca por su inteligencia pero esto es ponérselo muy fácil... A pesar de ser los años en los que más manifestaciones se llevan a cabo, la situación empeora día a día. Deberíamos empezar a echar la vista atrás y escuchar a nuestrxs mayores, esxs que se organizaban sin internet ni móviles y cumplían con los objetivos que se marcaban, esxs que deberían quedarse en casa sabiendo que sus jóvenes luchan por ellxs, debe producirse un relevo generacional que, creo, no se dará hasta que sepan que pueden confiar su futuro a lxs que hemos venido después. Tenemos que volver a la difusión boca a boca y en pequeños círculos si queremos estar un paso por delante, es más incómodo, lleva más tiempo, no seremos dos millones de personas y no habrá cientos del manifestaciones a la semana, pero cada vez que nos juntemos lo haremos organizados y con posibilidades de hacer algo más allá de unos cuantos disturbios. Es mejor que sean pocas acciones y conseguir buenos resultados que muchas inservibles plagadas de detenidos y heridos.
 
Se arrastra la mala costumbre desde el 15M de la necesidad en la ausencia de líderes, lo que creo que nos lleva a acabar en pequeños grupos desorganizados retrocediendo. Una cosa  es tener un líder para que haga y deshaga a su antojo y otra que se designe a unas cuantas personas con capacidad de reacción y cierta habilidad para la estrategia, que sean capaces de mover grupos de gente donde la acción y el momento lo requieran. Del mismo modo, creo que hacen falta centinelas que encuentren los puntos débiles que va dejando el enemigo en sus movimientos. Se cree que por jugar todxs el mismo papel nos hace mejores como masa pero nos convierte, como decía antes, en pequeños grupos que retroceden, cierto es que algunos pequeños grupos van intentando crear barricadas y ofrecer resistencia, pero siempre retocediendo, no somos capaces de ganar nunca la posición y eso nos convierte, una y otra vez, en los perdedores. 
 
Hemos tenido suficientes ejemplos que nos demuestran que no podemos ser tan ambiciosos en nuestros objetivos si no somos capaces de luchar como corresponde. Que se disuelva el Congreso! queremos acabar con la monarquía! con el gobierno! y hasta acabar con el capitalismo en nuestro país!!! todo ello, repitiendo una y otra vez nuestros movimientos, chocando de frente contra un muro que, a día de hoy, no sabemos cómo derribar. Tenemos que ser más humildes en nuestros objetivos y no querer ganar la guerra antes de empezar la batalla. Debemos organizarnos y conquistar poco a poco, desde abajo que es de donde venimos y, una vez tengamos experiencia de las batallas ganadas en nuestros barrios, intentar abarcar objetivos mayores y más ambiciosos, pretendemos asediar el Congreso sin haber asediado una triste Junta Municipal de barrio... Debemos ser realistas y, como decía anteriormente, conseguir mucha más experiencia y más tarde, al menos, tendremos más posibilidades de conseguir grandes cosas, de momento, han demostrado que pueden tomar el centro de Madrid y nosotrxs no, pero no creo que tengan la misma facilidad para hacer esos despliegues en los barrios y sin aviso. En nuestros barrios conocemos mejor el terreno que ellos, les podemos superar en número y contamos con una solidaridad vecinal con la que no se cuenta en el centro (para el 25A se pidió que se dejasen los portales abiertos para el refugio de los manifestantes y yo, personalmente, no vi un solo portal abierto. Estoy seguro de que esto no pasaría en los barrios obreros con conciencia de clase). 
 
 
En nuestro bando contamos con detenidos, torturados, mutilados y muertos, el bando del poder cuenta con todos sus efectivos y, si no cambiamos pronto nuestra estrategia, seguiremos siendo los únicos que sufran bajas entre los suyos.
 
La lucha es el único camino pero para poder luchar tenemos que aprender a hacerlo juntxs y organizadxs

No hay comentarios:

Publicar un comentario