El sistema sabe del desgaste irreversible de sus partidos y casta.
Por ello anda buscando personajes populistas y reaccionarios, que
embauquen a las buenas gentes y las mantengan en el redil del régimen.
Estas últimas semanas parece que estuvieran sondeando con tertulias,
entrevistas y reportajes la simpatía que es capaz de atraer Revilla, el
que fuera presidente de Cantabria. Sus frases populacheras y los regalos
de anchoas en La Zarzuela no pueden ocultar que se trata de un
personaje muy ligado al franquismo. Vean algunas piezas:
El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, afirmó en relación a la polémica suscitada por la retirada de la estatua ecuestre de Franco en Madrid y la decisión del alcalde de Santander, Gonzalo Piñeiro, de hacer lo mismo con la que se encuentra en la Plaza del Ayuntamiento que él "no la quitaría" porque "la historia hay que asumirla y criticarla".
En declaraciones al programa 'Tal Cual’ de Telecabarga, Miguel Ángel Revilla aseguró que si de él dependiera "no la quitaría de ningún sitio" sino que la "mantendría".
El presidente de Cantabria dijo que "es muy peligroso" entrar en ésa dinámica "porque entonces estaríamos cambiando las calles todos los días" y reiteró: "yo no cambiaría nada".
Antiguo miembro del sindicato vertical, Revilla recuerda la abnegada labor del régimen fascista del dictador Franco, en la represión de la Guerrilla Antifascista, por parte de la Guardia Civil en Polaciones.
En los años cuarenta, relata el Presidente de Cantabria, con gran emoción, que todavía se acordaba de cuando aún era un niño de sólo ocho años, su madre le mandaba por la noche a llevar la comida a la pareja de guardias civiles que se quedaban en uno de los invernales que cubrían el paso de montaña entre el Valle de Polaciones y el Liébana.
Relataba la función absolutamente abnegada de estos servidores de la patria; que tenían encomendada la misión de vigilar este paso de montaña durante turnos de un mes, y de manera continua, para intentar dar caza a los antifascistas que permanecían en el monte (el Cariñoso, Juanín, etc...), a los que él denominaba genericamente "los que pasaban de Francia". Cosa, por contra, en parte incierta, ya que varios de aquellos resistentes -como "El Cariñoso", se vieron obligados a "echarse al monte", debido a las palizas y a la brutal represión que recibieron por parte de la Guardia Civil, cauno volvieron a us pueblos tras el fin de la guerra, por el mero hecho de haber pertenecido a organizaciones de izquierdas, o simplemente simpatizado.
Dice Revilla, que es por ese ejemplo de abnegada labor, que se sabe el himno de la Guardia Civil. Y que si fuera un delincuente, con los últimos que le guastaría encontrarse, sería con ellos. Pero que como es una persona honrada, se enorgullece de estar a su lado. Y por eso viajaba a Madrid al desfile militar del Día de la Hispanidad, donde ha estado cantando el himno de la Guardia Civil a grito pelado.
El presidente de Cantabría, Miguel Ángel Revilla, cree que en España hay un millón y medio de "parados crónicos" que "ni en las mejores condiciones económicas van a trabajar", según recoge El Diario Montañés.
Revilla durante su participación en el programa de Tele 5, 'La Noria', recordó que hace cuatro años vinieron muchos inmigrantes a hacer trabajos que los españoles no querían. Una realidad "terrible", apostilló, para los 4,3 millones que "sí quieren trabajar y no pueden".
Del mismo modo, el presidente cántabro se mostró en dicho programa partidario de las medidas de la canciller alemana Ángela Merkel en las que los trabajadores "cobran menos, pero todos trabajan".
El 15 de julio de 1973 el «Diario Montañés» se hizo amplio eco de una conferencia de Revilla sobre «España, en la encrucijada de la Europa comunitaria» en la sede de la Jefatura Local del Movimiento. No faltaron en ella las frases de la más pura ortodoxia: «Si somos una unidad de destino en lo universal tenemos el pleno derecho a proclamarlo, a mantener la soberanía de nuestro esquema institucional y de nuestro contenido espiritual». Y abundaba: «Tenemos una ideología que siempre he pensado que era exportable, en función, naturalmente, de una actualización del pensamiento de José Antonio». Ese acto protagonizado por el hoy presidente filosocialista de Cantabria había sido previamente anunciada a bombo y platillo por el «Alerta»: «Se avisa a todos los camaradas de esta Lugartenencia, Vieja Guardia, Sección Femenina, Frente de Juventudes y público en general (…) para que asista a la conferencia del camarada Miguel Ángel Revilla Roiz». Tres décadas largas después, en 2008, el PRC decidía no presentarse a las elecciones generales y Revilla apoyaba sin ambages al PSOE; asistió incluso a un mitin de Felipe González en Santander.
Lahaine/publico/agencias/foroporlamemoria
OTRA HUMANIDAD ES NECESARIA
El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, afirmó en relación a la polémica suscitada por la retirada de la estatua ecuestre de Franco en Madrid y la decisión del alcalde de Santander, Gonzalo Piñeiro, de hacer lo mismo con la que se encuentra en la Plaza del Ayuntamiento que él "no la quitaría" porque "la historia hay que asumirla y criticarla".
En declaraciones al programa 'Tal Cual’ de Telecabarga, Miguel Ángel Revilla aseguró que si de él dependiera "no la quitaría de ningún sitio" sino que la "mantendría".
El presidente de Cantabria dijo que "es muy peligroso" entrar en ésa dinámica "porque entonces estaríamos cambiando las calles todos los días" y reiteró: "yo no cambiaría nada".
Antiguo miembro del sindicato vertical, Revilla recuerda la abnegada labor del régimen fascista del dictador Franco, en la represión de la Guerrilla Antifascista, por parte de la Guardia Civil en Polaciones.
En los años cuarenta, relata el Presidente de Cantabria, con gran emoción, que todavía se acordaba de cuando aún era un niño de sólo ocho años, su madre le mandaba por la noche a llevar la comida a la pareja de guardias civiles que se quedaban en uno de los invernales que cubrían el paso de montaña entre el Valle de Polaciones y el Liébana.
Relataba la función absolutamente abnegada de estos servidores de la patria; que tenían encomendada la misión de vigilar este paso de montaña durante turnos de un mes, y de manera continua, para intentar dar caza a los antifascistas que permanecían en el monte (el Cariñoso, Juanín, etc...), a los que él denominaba genericamente "los que pasaban de Francia". Cosa, por contra, en parte incierta, ya que varios de aquellos resistentes -como "El Cariñoso", se vieron obligados a "echarse al monte", debido a las palizas y a la brutal represión que recibieron por parte de la Guardia Civil, cauno volvieron a us pueblos tras el fin de la guerra, por el mero hecho de haber pertenecido a organizaciones de izquierdas, o simplemente simpatizado.
Dice Revilla, que es por ese ejemplo de abnegada labor, que se sabe el himno de la Guardia Civil. Y que si fuera un delincuente, con los últimos que le guastaría encontrarse, sería con ellos. Pero que como es una persona honrada, se enorgullece de estar a su lado. Y por eso viajaba a Madrid al desfile militar del Día de la Hispanidad, donde ha estado cantando el himno de la Guardia Civil a grito pelado.
El presidente de Cantabría, Miguel Ángel Revilla, cree que en España hay un millón y medio de "parados crónicos" que "ni en las mejores condiciones económicas van a trabajar", según recoge El Diario Montañés.
Revilla durante su participación en el programa de Tele 5, 'La Noria', recordó que hace cuatro años vinieron muchos inmigrantes a hacer trabajos que los españoles no querían. Una realidad "terrible", apostilló, para los 4,3 millones que "sí quieren trabajar y no pueden".
Del mismo modo, el presidente cántabro se mostró en dicho programa partidario de las medidas de la canciller alemana Ángela Merkel en las que los trabajadores "cobran menos, pero todos trabajan".
El 15 de julio de 1973 el «Diario Montañés» se hizo amplio eco de una conferencia de Revilla sobre «España, en la encrucijada de la Europa comunitaria» en la sede de la Jefatura Local del Movimiento. No faltaron en ella las frases de la más pura ortodoxia: «Si somos una unidad de destino en lo universal tenemos el pleno derecho a proclamarlo, a mantener la soberanía de nuestro esquema institucional y de nuestro contenido espiritual». Y abundaba: «Tenemos una ideología que siempre he pensado que era exportable, en función, naturalmente, de una actualización del pensamiento de José Antonio». Ese acto protagonizado por el hoy presidente filosocialista de Cantabria había sido previamente anunciada a bombo y platillo por el «Alerta»: «Se avisa a todos los camaradas de esta Lugartenencia, Vieja Guardia, Sección Femenina, Frente de Juventudes y público en general (…) para que asista a la conferencia del camarada Miguel Ángel Revilla Roiz». Tres décadas largas después, en 2008, el PRC decidía no presentarse a las elecciones generales y Revilla apoyaba sin ambages al PSOE; asistió incluso a un mitin de Felipe González en Santander.
Lahaine/publico/agencias/foroporlamemoria
OTRA HUMANIDAD ES NECESARIA
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