Etiquetas

martes, 15 de enero de 2013

DISCURSO DE LENIN EN UN MITIN DE PROTESTA TRAS LOS ASESINATOS DE KARL LIEBKNECHT Y ROSA LUXEMBURGO



 15.01.2013
Hoy la burguesía y los social-traidores están jubilosos en Berlín, lo consiguieron asesinando a Karl Liebknecht y Rosa Luxemnburgo. Ebert y Scheidemann, quienes durante cuatro años condujeron a los trabajadores a la masacre por el bien de la depredación, ahora han asumido el papel de carniceros de los líderes proletarios. El ejemplo de la revolución alemana demuestra que la ”demorcacia” es sólo un camuflaje para el robo burgués y la violecia más salvaje.
¡Muerte a los carniceros!
— V.I. Lenin, Discurso en un Mítin en Protesta Tras los Asesinatos de Karl Liebknecht y Rosa Luxemburgo
Las anteriores líneas fueron escritas antes del brutal y cobarde asesinato de Karl Liebknecht y Rosa Luxemburgo por el gobierno de Ebert y Scheidemann. Estos carniceros, en su servilismo a la burguesía, permitió a los guardias blancos alemanes, los perros guardianes de la sagrada propiedad capitalista, linchar a Rosa Luxemburgo, asesinar a Karl Liebknecht disparándole por la espalda con el pretexto evidentemente falso de que ”intentó escaparse” (el zarismo ruso usó mucho esta excusa para asesinar prisioneros durante la sangrienta represión de la revolución de 1905).
¡Al mismo tiempo, aquellos carniceros protegieron a los guardias blancos con la autoridad del gobierno, que afirma ser inocente y estar por encima de las clases! No hay palabras para describir el abobinable y asqueroso carácter de la carnicería perpretada por presuntos socialistas. Evidentemente, la historia ha escogido un camino en el que el papel de los ”lugartenientes obreros de la clase capitalista” debe ser llevado al grado extremo de la ferocidad, ignominia y la vileza.
¡Dejad a aquellos simplones, los Kautskianos, hablar en su periódico Freiheit sobre una ”corte” de representantes de ”todos” los partidos ”socialistas”! (¡aquellas almas serviles insisten en que los verdugos de Scheidemann son socialistas!). Estos campeones de la necedad filistea y de la cobardía pequeño-burguesa, ni siquiera comprenden que un tribunal es un  órgano del poder estatal, y que la la lucha y la guerra civil que ahora en Alemania se libra precisamente por ver en manos de quien queda el poder: en manos de la burguesía, servida por los Scheidemanns como verdugos e instigadores de progromos, y por los Kautskianos como glorificadores de la ”democracia pura”, o en manos del proletariado, que derrocará a los explotadores capitalistas y aplastará su resistencia . La sangre de los mejores representantes de la Internacional proletaria mundial, de los inolvidables líderes de la revolución socialista mundial, templará a nuevas masas de trabajadores animándolas a una lucha a muerte. Y esta lucha nos conducirá a la victoria.

No hay comentarios:

Publicar un comentario