10.12.2012
Silvio en Santiago.
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La fiesta comenzó a las 21:00 horas del sábado (00:00 GMT) y se extendió hasta pasadas las 02:00 horas (05:00 GMT) de este domingo, con recuerdos de los crímenes de la dictadura de Agusto Pinochet y cantos al futuro.
Silvio inició el espectáculo con Carta a Violeta Parra, cuyos acordes hicieron brotar de la multitud exclamaciones, aplausos, banderas de Cuba y Chile, y de las Juventudes Comunistas y del pueblo Mapuche, entre otras alegorías.
"Yo en definitiva estoy aquí porque conocí a una persona que se llamaba Víctor Jara. Yo estoy aquí porque conocí a una persona que se llamaba Gladys Marín. Yo estoy aquí porque conocí a una persona que se llama Isabel Parra. Por eso estoy aquí", expresó el cantautor cubano.
Luego de su homenaje a Violeta Parra, Silvio regaló Cita con Ángeles, Santiago de Chile, Historia de la silla, Mujeres y Escaramujo, con lo debió poner fin a su presentación para dar paso a los artistas del patio.
"A la juventud chilena, a la aguerrida juventud universitaria, secundaria", dijo el trovador antes de entonar Escaramujo, acompañado del Trío Trovarroco, la flautista y clarinetista Niurka González y Oliver Valdés, en la batería y percusión.
Tras retirarse del escenario, a pedido de la multitud retornó para cantar Ángel para un final, tema dedicado a las víctimas de un accidente de aviación ocurrido aquí poco más de un año.
"Un nuevo Chile es posible", "El pueblo unido, jamás será vencido", "Viva Silvio", "Vivan Cuba y Chile", fueron algunas de las frases que afloraron en cadena del público, la inmensa mayoría jóvenes, miles de ellos de pie en la cancha del estadio.
El recinto, lleno esta vez de colores y música, guarda en su historia algunas de las heridas más profundas de la dictadura Pinochet (1973-1990), ya que con el golpe de Estado fue convertido en un centro de reclusión, tortura y muerte. Silvio viajó por primera vez a Chile en 1972, durante el Gobierno de Salvador Allende, quien se suicidara el día del cuartelazo, luego de hacer frente a punta de fusil a las fuerzas golpistas, para evitar caer en sus manos.
Durante el período de la dictadura los militares censuraron su música, y no fue hasta 1990 con la caída del pinochetismo que el artista pudo regresar a Chile. Después visitó el país en otras oportunidades.
El presidente del Partido Comunista de Chile, Guillermo Teillier, agradeció al trovador cubano su presentación, y recordó como a pesar de que sus canciones estaban prohibidas aquí durante la dictadura, florecieron como rosas rojas de resistencia y de aliento para seguir combatiendo
"Ese gesto, tan conmovedor de tu parte Silvio, se corresponde con la solidaridad entre nuestros pueblos, que estamos seguros perdurará por mucho tiempo. Chile te sigue admirando y queriendo", enfatizó Teillier en sus palabras centrales de la conmemoración.
Al escenario también subieron las agrupaciones chilenas Cantata RockInti Illimani, Illapu, Sol y Lluvia y los cantantes Manuel García y Chinoy, con temas alegóricos a la historia del país, muchos de ellos referentes del período dictatorial, el exilio y las luchas sociales.
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