Cuando se sube el IVA se corre el riesgo de que el estado piensa
recaudar de más, no lo haga porque baje el consumo. Lo que gana por un
lado lo pierde por otro, pero encima empobrece más y más a la población.
Esto es, exactamente, lo que está ocurriendo. El IVA al 21% está
contrayendo a la economía de un modo acelerado. Todo el mundo lo ve en
el comercio, los que no cierran siguen bajando las ventas. La recesión
no ha hecho más que empezar.
Las ventas del comercio al por menor se anotaron una caída interanual del 12,6% en septiembre, lo que supone ahondar en diez puntos el descenso de agosto, cuando cayeron el 2% -dato revisado a la baja-. Eliminando el efecto calendario, las ventas del sector retrocedieron un 10,9%, según ha informado hoy el INE.
Con este descenso, el comercio minorista acumula ya 27 meses consecutivos de caída de sus ventas, aunque este dato supera con creces cualquiera de las anteriores marcas registradas. También ha sido mucho peor de lo esperado: de media, el consenso de analistas consultados por Bloomberg esperaban una bajada del 7,8%.
En los nueve primeros meses del año, el comercio ha reducido un 6% sus ventas en comparación con el mismo periodo de 2011.
Caída mensual del 9,6%
La entrada en vigor del alza del IVA, que elevó el tipo general del 18% al 21%, ha influido de forma significativa en el comportamiento de los consumidores. De acuerdo con los datos del organismo estadístico, en términos intermensuales el comercio minorista registró un descenso del 9,6%.
Por tipo de productos, las ventas en alimentación cayeron un 5,9% en septiembre, mientras que las del resto se desplomaron un 16,8%. Este epígrafe recoge descensos del 7,7% en equipo personal, del 21% en equipo del hogar y del 15,9% en otros bienes.
Todos los modos de distribución disminuyeron sus ventas respecto a septiembre del año anterior, destacando la similitud entre las grandes superficies y las pequeñas cadena, que presentaron descensos superiores al 14% en ambos casos. Por su parte, las grandes cadenas se anotaron el menor retroceso, del 5,5%.
Las ventas del comercio al por menor se anotaron una caída interanual del 12,6% en septiembre, lo que supone ahondar en diez puntos el descenso de agosto, cuando cayeron el 2% -dato revisado a la baja-. Eliminando el efecto calendario, las ventas del sector retrocedieron un 10,9%, según ha informado hoy el INE.
Con este descenso, el comercio minorista acumula ya 27 meses consecutivos de caída de sus ventas, aunque este dato supera con creces cualquiera de las anteriores marcas registradas. También ha sido mucho peor de lo esperado: de media, el consenso de analistas consultados por Bloomberg esperaban una bajada del 7,8%.
En los nueve primeros meses del año, el comercio ha reducido un 6% sus ventas en comparación con el mismo periodo de 2011.
Caída mensual del 9,6%
La entrada en vigor del alza del IVA, que elevó el tipo general del 18% al 21%, ha influido de forma significativa en el comportamiento de los consumidores. De acuerdo con los datos del organismo estadístico, en términos intermensuales el comercio minorista registró un descenso del 9,6%.
Por tipo de productos, las ventas en alimentación cayeron un 5,9% en septiembre, mientras que las del resto se desplomaron un 16,8%. Este epígrafe recoge descensos del 7,7% en equipo personal, del 21% en equipo del hogar y del 15,9% en otros bienes.
Todos los modos de distribución disminuyeron sus ventas respecto a septiembre del año anterior, destacando la similitud entre las grandes superficies y las pequeñas cadena, que presentaron descensos superiores al 14% en ambos casos. Por su parte, las grandes cadenas se anotaron el menor retroceso, del 5,5%.
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