26 de Julio del 012.
ES UNA SANGRÍA PERMANENTE: Al menos veinte guardias de seguridad afganos que trabajaban para la OTAN se han pasado a las filas de los talibanes tras una disputa con soldados internacionales en el sur de Afganistán, informó hoy una fuente oficial.
Según explicó a Efe Wali Dad, jefe policial del distrito de Charchino -donde produjo la deserción-, "los guardas decidieron pasarse al bando taliban después de ser agredidos por soldados australianos como consecuencia de una discusión".
Los desertores se llevaron consigo "numeroso armamento ligero y pesado", precisó la fuente, que dijo desconocer el motivo de la discusión con los militares australianos.
La nueva defección se produce un día después de que ayer se anunciara que al menos 14 policías, entre ellos un alto mando, se han unido también a los talibanes, en un incidente registrado en el distrito de Bala Balok, en el oeste de Afganistán.
El jefe de la policía local, Aqa Noor Kintoz, declaró a la agencia afgana Pajhowk que el oficial que comandó la deserción, Mirwais Khan, estaba a cargo de tres puestos de control y que los huidos se llevaron dos coches policiales y abundante munición.
Los cambios de bando coinciden con un recrudecimiento de la actividad insurgente a raíz del proceso de retirada de las fuerzas de la OTAN, de acuerdo con un calendario que debe concluir en 2014, cuando se prevé que las fuerzas afganas asuman la seguridad en todo el país.
A PRINCIPIOS DEL MES DE JULIO TAMBIÉN SUCEDIÓ ESTO......
80 miembros de la policía local afgana desertaron y se pasaron a las filas del grupo Taliban el martes, junto a gran cantidad de armamento y municiones, en la provincia noroccidental de Badghis, Afganistán.
Hace tiempo que existen vínculos entre los integrantes del grupo Taliban y los soldados de la policía local en el área de Balamorghab, en la citada provincia, ha indicado este miércoles el portavoz del grupo Taliban, Gari Yusef Ahmadi.
Ha agregado que estas personas han abandonado sus puestos en la Policía por sus vínculos con el grupo Taliban.
Mientras tanto, las fuerzas de seguridad del noroeste del país asiático no han negado la noticia, limitándose a señalar el inicio de investigaciones.
Un oficial de alto rango que desea permanecer en el anonimato informó, no obstante, de que el número de fugados en Balamorghab (Badghis) no llegaba a 55 soldados y este miércoles por la mañana 15 de ellos han vuelto de nuevo a sus puestos de control.
La policía local ha agravado el reto de seguridad en el oeste del territorio afgano, y varios expertos políticos culpan al Gobierno afgano de no haber elegido con cuidado a los integrantes de la policía local.
Otra de las causas de tales deserciones, y no menos importante, es el “desprestigio de la fuerzas de la OTAN en Afganistán”: sus soldados protagonizan escándalos sin fin y cometen atrocidades contra el pueblo afgano.
El pasado enero, un video divulgado en Internet mostró a cuatro soldados estadounidenses orinando sobre cadáveres de afganos.
En febrero, los soldados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) destacados en la base de Bagram, en el norte de la capitalina Kabul, quemaron varios ejemplares del Corán, el libro sagrado de los musulmanes.
En abril, una serie de fotos publicadas por el diario “Los Angeles Times” mostró como las fuerzas de Estados Unidos posaban con los cuerpos destrozados de varios ciudadanos afganos.
Tales actos han desatado en múltiples ocasiones la ira del pueblo afgano y manifestaciones antiestadounidenses multitudinarias. Así pues, no extraña que integrantes de la policía afgana duden a la hora de elegir lealtades: entre Taliban y el aparente libertador desnortado que, no obstante, busca sus propios intereses en el país, ofende a la población, sus creencias y mata indiscriminadamente civiles.
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