Presidente sirio Bashar Al Assad
18 ago 2013 - El presidente de Siria, Bashar al-Assad, aseguró hoy que
el país enfrenta el terrorismo y lo erradicará, al recibir a una
delegación de actores políticos, sindicales y sociales de Mauritania que
llevan varios días de visita en esta capital.
En Damasco expertos de ONU sobre armas químicas
El mandatario también insistió en que se trabaja en la búsqueda de una solución política al conflicto armado mediante un diálogo sin injerencias entre los propios sirios, pero sin renunciar al principio de la defensa nacional frente a los ataques de bandas mercenarias y grupos radicales islámicos que disponen abierto apoyo foráneo para derrocar al gobierno.
También agradeció la solidaridad de la comitiva y del pueblo mauritano, al tiempo que insistió en la necesidad de que los partidos y organizaciones sociales árabes denuncien la esencia imperialista del contencioso que a su juicio, solo beneficia los planes expansionistas de Estados Unidos e Israel.
Los miembros de la delegación del país norteafricano recordaron que Siria constituye un nodo esencial del llamado Eje de Resistencia árabe y confirmaron sus apoyo a las posturas nacionalistas del pueblo y las autoridades sirias.
Manifestaron asimismo su fe en la resistencia de Damasco para alcanzar la victoria contra lo que calificaron como complot internacional fraguado por administraciones occidentales y de la región para destruir a esta nación mesoriental. Durante su estadía en la capital siria, la comitiva se ha reunido con importantes personalidades de la vida política, social y religiosa, entre ellos el primer ministro, Wael al-Halaki, el presidente de la Asamblea del Pueblo (Parlamento), Mohamad Yihad al-Laham y el Gran Muftí de la República, Ahmad Bader al-Din Hassoun.
En Damasco expertos de ONU sobre armas químicas
El mandatario también insistió en que se trabaja en la búsqueda de una solución política al conflicto armado mediante un diálogo sin injerencias entre los propios sirios, pero sin renunciar al principio de la defensa nacional frente a los ataques de bandas mercenarias y grupos radicales islámicos que disponen abierto apoyo foráneo para derrocar al gobierno.
También agradeció la solidaridad de la comitiva y del pueblo mauritano, al tiempo que insistió en la necesidad de que los partidos y organizaciones sociales árabes denuncien la esencia imperialista del contencioso que a su juicio, solo beneficia los planes expansionistas de Estados Unidos e Israel.
Los miembros de la delegación del país norteafricano recordaron que Siria constituye un nodo esencial del llamado Eje de Resistencia árabe y confirmaron sus apoyo a las posturas nacionalistas del pueblo y las autoridades sirias.
Manifestaron asimismo su fe en la resistencia de Damasco para alcanzar la victoria contra lo que calificaron como complot internacional fraguado por administraciones occidentales y de la región para destruir a esta nación mesoriental. Durante su estadía en la capital siria, la comitiva se ha reunido con importantes personalidades de la vida política, social y religiosa, entre ellos el primer ministro, Wael al-Halaki, el presidente de la Asamblea del Pueblo (Parlamento), Mohamad Yihad al-Laham y el Gran Muftí de la República, Ahmad Bader al-Din Hassoun.
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