9 julio, 2013
Toussaint Louventure y Leonardo de Pisa Fibonacci
Los acontecimientos del año presidencial hasta el final derrocamiento de Mursi.
Todo el desarrollo del año de gobierno
de Mursi ha estado marcado por la acumulación cuantitativa de tensiones
sociales. Conflictos en base a las diferentes luchas obreras y de las
diferentes capas sociales por la consecución de mejoras en sus
condiciones de vida, como ya hemos podido ver en anteriores apartados
del artículo.
A ello, se han sumando una serie de
sucesos políticos que han aportado una suma cuantitativa al conjunto de
las tensiones sociales, que estaban presentes, y que finalmente han
conllevado a un salto cualitativo en la situación. Todas las tensiones
han supuesto la incorporación de cada vez más gente -numéricamente- y
capas sociales al movimiento que, finalmente y dada su fuerza, han
derrocado al gobierno de Mursi.
Así, al día siguiente de su victoria
electoral se produjo la disolución de la cámara baja -con capacidad
legislativa. Ésta es decretada por el ejército, debido a la denuncia de
supuestas irregularidades en la elecciones presidenciales ganadas por
Mursi. El ejército sostiene en sus manos el poder legislativo. Esto
conlleva las primeras tensiones políticas entre ambos. Mursi trata de
restablecerla un mes después. Finalmente, el 12 de agosto de 2012, Mursi
aprobó una nueva declaración constitucional por la que pasa a sus manos
el poder legislativo24, dado que el parlamento está
disuelto, y convoca la constitución de una Asamblea Constituyente
-capacidad que solo detenta Mursi- para promulgar una nueva
Constitución. La centralización del poder en Mursi supone las primeras
críticas de la oposición -recordemos que en gran parte también ligada a
los intereses de las potencias imperialistas internacional- en esta
dirección.
La absolución de 24 altos cargos del
gobierno de Mubarak, en octubre de 2012, por la represión ejercida en
febrero 2011, supone un nuevo jalón que genera enfrentamientos en la
Plaza de Tahrir y el incremento de las tensiones sociales.
Finalmente, Mursi convocó la Asamblea
constituyente en noviembre de 2012, con una mayoría de miembros de los
Hermanos Musulmanes y Salafistas, lo que desata las denuncias y las
críticas de inconstitucionalidad por “no representar al conjunto de la
sociedad” -especialmente a los independientes. La Asamblea Constituyente
claramente beneficia el asentamiento del poder de los Hermanos
Musulmanes; lo necesitan para establecer un gobierno estable que afronte
la crisis desde las perspectiva e intereses de las potencias
internacionales, pero dando un considerable peso al islamismo. Así, es
redactada la Constitución que será aprobada en referéndum en diciembre
de 2012. Sobre la convocatoria del referéndum también recaen denuncias
de inconstitucionalidad desde la oposición. Y, a la par, también
coincide la remodelación de gobierno de Mursi que, a principios de enero
de 2013, presenta los nuevos 10 ministros que sustituyen a los
anteriores e incrementan el peso de los Hermanos Musulmanes. Se produce
la vuelta a la plaza de Tahrir, en esta ocasión son las capas sociales
que apoyan a la oposición las que toman la plaza y confrontan con la
policía y con las capas populares que apoyan a los Hermanos musulmanes.
Se producen varios muertos en los enfrentamientos25.
Entre tanto, se sucede la respuesta a
las manifestaciones de Port Said. La brutal represión de la policía se
saldó con una cuarentena de muertos -entre los manifestantes que
protestaban contra las penas de muerte decretadas contra los aficionados
que provocaron los graves incidentes, un año atrás, en un partido de
futbol-26. Mursi decreta el estado de emergencia y el toque
de queda en la zona. Un acontecimiento que echa más leña a una caldera
social ya de por sí caliente.
Como salida de la situación de tensión
social y confrontación, la oposición, junto con los salafistas, ofrecen a
Mursi una propuesta de formación de gobierno de unidad nacional.
En marzo de 2013 el Tribunal Superior
Administrativo suspende el proceso de elecciones legislativas, aprobado
por el gobierno de Mursi tras la aprobación de la Constitución, por ser
inconstitucional la ley electoral. Sigue estando en el aire la
resolución judicial sobre la formación de la Asamblea Constitucional, la
Constitución elaborada en la misma y sobre el referéndum . Finalmente, a
principios de junio, el Tribunal Constitucional egipcio declaró
inválidas la ley electoral por la que se eligió la Cámara alta del
Parlamento27, que en ese momento ejerce todo el poder
legislativo, y la composición de la Asamblea Constituyente. A su vez,
esto supone que se falla en contra de la Constitución y su referéndum.
La crisis social está en su clímax y se
produce el salto cualitativo en las tensiones sociales. A finales de
Junio, la oposición vuelve a la Plaza de Tahrir. Acampa allí hasta que
se produzca la dimisión de Mursi y la convocatoria de nuevas elecciones.
Obama abandona el apoyo a Mursi y le pide que convoque elecciones
presidenciales28. El ejército protege a la parte de las masas
populares opositoras acampadas en Tahrir para evitar que sean atacados
por la parte de las masas populares que apoyan a los Hermanos
Musulmanes. El día 1 de julio el ejército establece un ultimátum de 48
horas a Mursi para que cumpla las demandas populares. Se produce la
crisis en el gobierno de Mursi con 5 dimisiones29. Éste
propone la constitución de un gobierno de unidad nacional pero no
dimite. Por orden del General Al-Sisi el ejército sale a la calle,
depone a Mursi al frente del país, toma oficialmente el poder mediante
golpe de estado y detiene a Mursi. Se abre un proceso de gobierno
interino con militares, al frente del cual se sitúa Adli Mansur -hasta
ese momento Presidente del Tribunal Constitucional- , y la elaboración
de una hoja de ruta que desemboque en unas nuevas elecciones
presidenciales. Tanto EE.UU. como la UE avalan la actuación del ejército
y esperan que el desarrollo de este proceso se dirija hacia un gobierno
de la oposición, con el cual puedan estabilizar Egipto para la
consecución de sus intereses.

Conclusiones: gobierno Islámico-liberal vs gobierno Laico-liberal no es la meta de los trabajadores.
Los intereses de EE.UU. y la UE son
cubiertos tanto por el laicismo como por el islamismo, siempre y cuando
defiendan la economía de mercado y permita el desarrollo de los
intereses económicos y geopolíticos de EE.UU. y la UE. Recurrirán a un
formato o al otro en función de la situación interna del país y de su
relación política con quienes encarnan uno u otro. Mientras que en el
Egipto 2012 promovían el islamismo-liberal, ahora es más funcional,
dadas las circunstancias, el laicismo-liberal. Y viceversa en otros
países. Ni pensar en el laicismo nacionalista de fuerte intervención del
Estado y de nacionalización de la economía. Igualmente, tiene
influencia la intervención de Qatar, que tienen depositados sus
intereses económicos y políticos en el gobierno islámico-liberal en
Egipto; así actualmente establecen una contradicción en la zona con sus
aliados internacionales.
No cabe duda que la clase obrera y el
campesinado tienen puestos sus ojos y su esfuerzo en alcanzar mejores
condiciones de vida; por ello empiezan a actuar, con mayor intensidad,
en la lucha política de la oposición. A la luz de los datos y de los
hechos, no cabe duda de que tácticamente el gobierno laico-liberal les
supone un avance para poder llevar a cabo sus luchas: que no les sean
prohibidas las huelgas, que puedan militar en partidos políticos legales
con mayor amplitud de movimientos frente a una férrea persecución
política,….De esta forma tendrán mayor capacidad de organizar un
movimiento obrero y revolucionario independiente. Para esta última
condición es necesario que presten atención a sus aliados, que no se
dejen embaucar por ellos porque les tratarán de llevar hacia el
liberalismo, hacia los intereses del imperialismo estadounidense y
europeo, hacia los intereses de los grandes empresarios y banqueros
nacionales e internacionales. Ahí está la consigna de la reconciliación
nacional y de la unidad nacional por encima de las diferencias de clase.
Una unidad nacional que en estos momentos difíciles les reclama
paralizar el movimiento huelguístico, como lo hizo el propio al-Badawi
(Partido Wafd) y Amr Musa.
Tarde o temprano será necesaria la
explosión del frente único de la oposición para la resolución de las
contradicciones internas entre los diferentes grupos políticos, entre
las capas sociales que la integran. Evidentemente será una vez
alcanzado el objetivo, una vez instaurado un estado laico, con amplios
derechos democráticos para los trabajadores, que permitirá esa mayor
capacidad de movimientos a la clase obrera y a los campesinos. En este
proceso de 2013 parece que las fuerzas obreras y populares alcanzarán
mayores logros económicos y políticos -finalmente dependerá de su
fuerza-, pero, como se ha comprobado, no dejarán de ser estrechos,
falsos o parciales en la práctica -en muchos casos- y temporales, bajo
esta (y cualquier) forma de gobierno del régimen capitalista.
…
Final del articulo
Notas:
[24] Decreto de Mursi por el que se le otorga el poder ejecutivo:
http://www.publico.es/internacional/440933/mursi-jubila-al-mariscal-tantawi-y-quita-poder-al-ejercito
[25] Conflicto de principio de año
http://www.excelsior.com.mx/2013/01/30/881888
[26] Represión en Port Said:
http://lamanchaobrera.es/siria-ese-conflicto-inventado-por-la-otan/
[27] Declaración de nulidad de la Asamblea Constituyente:
http://internacional.elpais.com/internacional/2013/06/02/actualidad/1370173705_556654.html
[28] La pérdida del favor de Obama, ya no es útil para el control del país:
http://www.aurora-israel.co.il/articulos/israel/Titular/52276/
[29] Dimisión de 5 ministros del Gobierno de Mursi:
http://www.expansion.com/2013/07/02/economia/politica/137276689