31.01.2013
Níkolas Stolpkin.
Introducción
La mejor manera de
abordar un acontecimiento y poder descifrarlo no es verlo desde una
perspectiva meramente“oficial”. Lo “oficial” pasa a ser tan solo un
complemento. Debemos darnos el trabajo de tomar cierta distancia con
respecto a los acontecimientos y, a partir de ahí, ir configurando una
óptica clara que junto a una serie de elementos nos permitirán ver de
una mejor forma los acontecimientos que buscamos poder descifrar.
Es así como habremos de abordar la pasada Cumbre CELAC-UE (Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños
- Unión Europea) o el encuentro entre América Latina, el Caribe con
Europa, celebrada en Santiago de Chile, los días 26, 27 y 28 de enero y
dividido (el encuentro) en dos partes: la CELAC-UE y la CELAC solamente.
Quizá para el común
de las personas lo “oficial” los ha de dejar más que satisfechos. Para
los que abrazamos ciertos ideales, lo “oficial” nunca nos será
suficiente. Sabemos que existen “reglas de oro” con las que nunca
debemos transar.
Históricamente Europa nunca ha sido una “blanca paloma”. Eso lo sabemos. América Latina y África lo saben de sobra.
Lo mismo con EEUU; América Latina y el Caribe saben bien las relaciones históricas que ese país ha cultivado.
Pero aquí nos interesa enfocarnos más en las intenciones de Europa que de EEUU, y más en los resultados para América Latina.
Sobre EEUU sabemos
lo suficiente; sobre Europa acostumbramos a no saber lo bastante, y nos
limitamos a verla como una zona culturalmente “desarrollada”, “superior”
y con muchos años de“historia”, acostumbrada muchas veces a esconder su
carácter IMPERIALISTA.
No nos engañemos. Si bien Europa no es EEUU, ella es parte del engranaje Imperial Capitalista capitaneados por EEUU.
Cumbre CELAC-UE
Si lo vemos desde
una perspectiva crítica, el encuentro CELAC-UE se ha parecido más al
encuentro entre un paciente y su cirujano que entre un cirujano y un
colega de su propia especialidad.
Dicha combinación pariera haberle quitado importancia a la propia CELAC, y más todavía cuando la UE hizo su retirada acordada.
La cobertura de los
medios informativos sobre el encuentro, que más adelante habremos de
tratar, puede graficar la diferencia entre una CELAC acompañada y una
CELAC sin compañía (como un paciente que se hubiera quedado en la
camilla del quirófano pero sin la presencia de su cirujano).
Los pies de Europa
dentro de América Latina, seamos objetivos, nunca podrían dar confianza,
y menos dentro del actual contexto histórico que atraviesa la propia
Europa.
América Latina está
acostumbrada a hacer el papel de un paciente obediente frente a
cirujanos de la talla de EEUU y Europa. Si el paciente se porta bien,
entonces recibirá las correspondientes felicitaciones: “lo están
haciendo muy bien, lo felicitamos por ello. Sigan así y alcanzarán a ser
como nosotros”. Ese siempre ha sido el trato entre grandes potencia y
las potencias pequeñas. Y en la pasada cumbre ¿por qué habría de ser la
excepción?
No hay que caer en
engaños. La relación asimétrica con Europa se sigue manteniendo aunque
se venda hoy el discurso de un cambio de paradigma en relación a una
supuesta “simetría” entre Europa y América Latina y el Caribe, con
respecto al trato.
Todos deberíamos
saber el rol que juega Europa en la actualidad, capitaneada por Alemania
y la zona que representa dentro del marco de la influencia económica
capitalista, que junto con EEUU y Japón hace parte de la Comisión
Trilateral, órgano creado en 1973 para fomentar la cooperación entre las
tres zonas de mayor influencia capitalista-capitaneados, por supuesto,
por EEUU.
¿Nunca no hemos
preguntado el por qué EEUU, Europa y Japón concentran el monopolio de la
Información, el Conocimiento y la Tecnología?
La Cumbre CELAC-UE
se da dentro de un contexto histórico en la cual nos encontramos con una
Europa sumergida dentro de una Crisis Económica que ha obligado a
algunos países a perder progresivamente sus Estados de Bienestar y al
mismo tiempo han instalado irremediablemente el modelo Neoliberal, el
cual en Latinoamérica ya estamos habituados a sus“bondades”.
Sin embargo, la
presencia europea en América Latina ha estado bajo distintas modalidades
desde la época de la Conquista hasta la actualidad con la denominada
“globalización”.
Lo importante ha
destacar es que bajo el Sistema de Producción Capitalista, Europa ha
venido penetrando con sus inversiones en América Latina de manera muy
considerable, llegando a ser hoy el primer inversor en América Latina,
con el 43% (2000-2005) de la Inversión Extranjera Directa (IED) en la
región y el 40% (2006-2010), según datos aportados por la CEPAL.
Durante la etapa
del “Modelo Sustitutivo de Importaciones” ó “Industrialización por
Sustitución de Importaciones” (ISI), modelo económico adoptado en
Latinoamérica comprendido entre 1930 y la primera mitad de 1970, las
inversiones directas europeas, a inicios de dicha etapa, tuvieron que
chocar con muchas barreras comerciales las cuales habrían de obligar a
focalizar sus inversiones en el sector Manufacturero (alimentos,
bebidas, productos químicos, etc), siendo las mayores economías los
mayores receptores de dicha inversión (Brasil, México y Argentina).
Estos últimos países llegarían a concentrar el 70% del acervo total de
IED europea antes de la “apertura económica” de los años 90. Siendo
Reino Unido, Alemania y Francia los principales inversores.
Con la “apertura
económica” o bien con la entrada acelerada del Modelo Neoliberal en
América Latina, en la década de 1990, Europa va a tener una gran
oportunidad para poder revitalizar su presencia inversora dentro del
continente.
Las profundas
reformas estructurales de Liberación de Mercados que Latinoamérica
habría de experimentar en la década de 1990, para así asegurar su
“inserción internacional”, habría de atraer el interés de muchas
empresas transnacionales y, entre ellas, muchas europeas, anclándose en
los más variados sectores de la economía de cada país. Eliminando, a su
vez, muchas restricciones al capital extranjero en los diversos sectores
como Servicios (Salud, Banca, Educación, Agua, Energía,
Telecomunicaciones) y Extractivos (hidrocarburos, minería), a través de
amplios procesos de privatización. Ampliándose aún más el apetito de
muchas empresas transnacionales por ir a invertir en América Latina.
Y es así como en la
segunda mitad de los años 90 Europa se transforma en la mayor fuente
emisora de Inversión Extranjera Directa en América Latina y el Caribe.
Reforzando así, aún más, su posición en los Mercados, los países que ya
venían teniendo una significativa presencia en los mercados
latinoamericanos, y permitiendo la incorporación de nuevos actores tales
como España y Portugal, que harían de América Latina su principal
plataforma de expansión internacional.
Con respecto a esto
último, el caso de España es muy particular. Y todos sabemos bien lo
que significa España para América Latina.
España: Del Imperio Colonial al Imperio Transnacional
Desde la caída del
imperio español, con la oleada independentista de sus colonias en el
siglo XIX, la influencia económica española –podemos aventurarnos en
decir que–, era irrisoria con respecto a los términos actuales.
Según algunos
estudios, antes de la I Guerra Mundial, Gran Bretaña realizaba dos
tercios de la inversión extranjera, controlando, además, más de la mitad
del movimiento marítimo de los puertos de Argentina y Brasil; y los
ferrocarriles que conectaban los puertos con los centros de producción,
estuvieron por mucho tiempo bajo el poder de los británicos.
Y sería entre los
primeros años del siglo XX y la I Guerra Mundial que EEUU habría de
lograr sus primeros avances significativos dentro de América Latina en
cuanto a inversión extranjera. Desplazando a Alemania y a Francia en
cuanto a inversión extranjera, dentro de América Latina.
Sería a partir de
la finalización de la II Guerra Mundial que EEUU se habría de imponer
como la principal potencia inversora dentro de América Latina.
Dentro de la
primera mitad del siglo XX, España apenas ni se veía dentro del marco de
inversión extranjera dentro de América Latina.
La década de 1960
sería el nacimiento, algo tímido, de España dentro de la escena en
cuanto a la Inversión Extranjera Directa, llegando a sumar la minúscula
cifra del 0,1% del total mundial.
La década de 1990
sería la gran irrupción de España dentro de América Latina en cuanto a
inversiones, consolidándose América Latina como el principal receptor de
IED de origen español. Concentrando España sus inversiones en el sector
Servicios, principalmente el área de las telecomunicaciones, la energía
y la banca.
Si bien hoy España
atraviesa por una gran crisis económica que ha obligado a perder
progresivamente su Estado de Bienestar, las inversiones españolas dentro
de América Latina están aún bien fortalecidas.
América Latina: Europa viene por más, en detrimento de China
En la actualidad, a
pesar de la crisis económica por la cual atraviesa, Europa sigue
manteniendo su lugar como la mayor fuente emisora de Inversión
Extranjera Directa en América Latina. No obstante, dicha crisis está
empujando a Europa a “expandir” aún más sus economías y aumentar el
flujo de capitales entre Europa y América Latina y el Caribe.
Lo anterior no
podría más que traducirse en una mayor profundización del Modelo
Neoliberal. Y para ello Europa buscará en América Latina y el Caribe un
“entorno favorable” para las empresas europeas y más “seguridad
jurídica” para los inversores.
No por nada la Unión Europea ha señalado del continente que “existe todavía un potencial de expansión considerable”.
Por tanto, la pasada Cumbre CELAC-UE tiene un importante significado para América Latina.
No podemos olvidar
que la penetración China dentro del continente ha tenido últimamente un
fuerte crecimiento en detrimento de EEUU y Europa, convirtiéndose
(China) en un socio comercial significativo en la mayoría de los países
del continente latinoamericano.
Hay que recordar,
además, que China ha estado ascendiendo de manera acelerada estas dos
últimas décadas, desplazando a potencias económicas tales como Alemania
(2007) y Japón (2011), que históricamente ocupaban el tercer y segundo
puesto, respectivamente, como potencias económicas mundiales.
La famosa etiqueta “made in usa”ya fue desplazada en cuanto a volumen por la etiqueta “made in china”.
Hoy China es la
segunda potencia económica mundial, pero ya están estimando, desde
varias estructuras de renombre (como el Banco Mundial), de que China,
con el actual ritmo de crecimiento, podría desplazar a EEUU, como la
primera potencia económica mundial, para el año 2025.
A lo anterior
habría que agregar que, hoy los países del BRIC (Brasil, Federación de
Rusia, India y China) se han posicionado como los principales receptores
de Inversión Extranjera Directa (IED), con más del 50% del total
mundial, desplazando a la triada conformada por EEUU, Europa y Japón
(las zonas de mayor influencia capitalista), consolidados en las últimas
décadas del siglo XX.
Entonces lo que estamos viendo son movimientos tectónicos a nivel económico mundial.
Vemos el progresivo
decaimiento del Bloque Capitalista Histórico (EEUU, Europa y Japón) y
vemos, por otro lado, la progresiva consolidación de un nuevo Bloque
Capitalista (China, India, Rusia, etc) conformado por países que
históricamente habían permanecido alejados de las reglas del Bloque
Histórico Capitalista.
Qué ha sucedido. Ha
sucedido que los nuevos actores dentro de la escena capitalista
mundial, al no ser incluidos en los propios terrenos de juego de los
históricos, se han organizado y han creado sus propios terrenos de juego
y sus reglas a través de sus propias estructuras, como la Organización
de Cooperación de Shanghái (OCS).
Qué han hecho los
históricos. Han permitido a los más grandes hacer parte de sus
estructuras para así quizá buscar quitarle peso a las nuevas
estructuras.
Sin embargo el ascenso potencial de nuevos actores o bloques capitalistas es irremediable.
Por tanto, la
pasada cumbre CELAC-UE debemos traducirla en el interés de Europa por
querer reforzar sus lazos con América Latina y, al mismo tiempo, tener
el interés de expandirse, aún más, económicamente dentro del continente,
buscando frenar el imbatible avance de China en lo económico, por una
parte; y, por otra, intentando obligar a América Latina y el Caribe a
retroceder la caída del modelo Neoliberal y, profundizar y fortalecer el
modelo Neoliberal, ya que sus actuales intereses no podrían concretarse
sin una profundización del modelo en particular.
El Modelo Neoliberal en retroceso
Es sabido que
dentro de América Latina en los últimos años se han venido desarrollando
cambios significativos para poder enfrentar al modelo Neoliberal que a
finales del siglo XX tuvo su punto más álgido.
La irrupción del
presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, bordeando la finalización
del siglo XX dentro de la escena latinoamericana, representa un cambio
significativo y esperanzador para los pueblos del continente que habían
sido zambullidos en el modelo Neoliberal.
En Venezuela, y su presidente, los pueblos de Latinoamérica comenzaban a depositar una esperanza.
El presidente Hugo
Chávez se habría de convertir dentro del continente en el mayor
representante de la lucha contra el Neoliberalismo y en un ejemplo real
del ejercicio de la Democracia en el mundo.
La osadía del
comandante Hugo Chávez con el tiempo se habría de ver reflejado en la
irrupción de presidentes latinoamericanos como Evo Morales (Bolivia,
2006) y Rafael Correa (Ecuador, 2007) con discursos y conceptos que
antes de la llegada de Hugo Chávez podían ser muy atrevidos para una
zona acostumbrada a la obediencia de las grandes potencias y a estar
dentro de la órbita de influencia de EEUU.
Es así como el
modelo Neoliberal, a comienzos del siglo XXI, comenzó a ver
significativos retrocesos y obstáculos a su desarrollo que iban en
contra de las reglas impuestas por EEUU y las estructuras
“internacionales” del bloque capitalista histórico (llámese Banco
Mundial y Fondo Monetario Internacional).
En la actualidad,
el modelo Neoliberal ha retrocedido significativamente en países como
Venezuela y Bolivia, países símbolos de la lucha contra el
Neoliberalismo en América Latina. Y es ese el ejemplo que los grandes
intereses no quieren que se expanda a los pueblos del continente, por lo
que habrá de difamarlos y atacarlos ideológicamente para que sus
ejemplos no crucen las fronteras.
No resulta ni
debería resultar extrañable el que países con clara orientación
Neoliberal desvíen la atención de sus ciudadanos para que no se sepa
mucho de las bondades de la lucha contra el Neoliberalismo y que solo se
enteren de informaciones negativas y despectivas sobre esas luchas para
que estas no se puedan replicar más allá de sus límites.
Tampoco habrá de
resultar extrañable el que en algunos países neoliberales sus ciudadanos
sepan más de Europa que de nuestros propios vecinos.
La cobertura de los Medios a la Cumbre de la CELAC-UE y CELAC
Todo aquello de
la“transparencia” en la información que había de haber con respecto a la
Cumbre CELAC-UE, y que algunos reconocidos expertos locales se
atrevieron a vaticinar, quedó lamentablemente en nada.
De transparencia no hubo nada –digamos las cosas por su nombre.
La señal oficial
junto con los medios anfitriones del encuentro, solo se limitaron a
mostrar lo que para el vulgo le estaba permitido ver: bienvenidas,
presentaciones, firmas, saludos, anécdotas, sonrisas, poses, fotos,
declaraciones, regalos, almuerzos, cenas, etc.
Pero ¿qué hubo en los “retiros privados” de mandatarios? ¿Qué tipo de acuerdos se firmaron, bilateral o multilateralmente?
¿Qué hubo más allá
de las distracciones mediáticas, como el caso “Jaime Guzmán” enarbolado
por la Derecha más conservadora chilena, representado por el partido de
la UDI (Unión Demócrata Independiente) que buscaba tocar al presidente
de Cuba, Raúl Castro?
¿Que hubo más allá
de las distracciones mediáticas, como la “respuesta” del presidente de
Chile, Sebastián Piñera a Evo Morales, presidente de Bolivia?
¿Qué hubo más allá
de las distracciones mediáticas, como el encuentro paralelo a la cumbre,
la llamada “Cumbre de los Pueblos”, que no pasaba más allá de un acto
meramente simbólico?
Todo indica que desde el primer momento tuvieron el interés de ocultar la “letra chica” y solo presentar la“letra oficial”.
Incluso se dieron
el gusto de no querer difundir –deliberadamente– traducción de discursos
de representantes de Europa o la Unión Europea.
En la señal oficial
se pudo ver, comenzar ofreciendo traducción, pero en cada una de ellas,
en menos de un minuto de traducción, se daban el lujo de ser
irrespetuosos con los televidentes al quitar dicha traducción; y en el
canal abierto de la Televisión Nacional de Chile (único que prestaba
cobertura significativa, conectada a la señal oficial), teniendo
traductores, no se dieron el trabajo de traducir discurso alguno.
Los discursos de
apertura y cierre, en la CELAC-UE, del presidente de Chile, Sebastián
Piñera, y los discursos de los representantes de la Unión Europea, José
Manuel Durao Barroso y Herman Van Rompuy, presidentes de la Comisión
Europea y el Consejo Europeo respectivamente, fueron los únicos
discursos que se dieron a conocer tanto en la señal oficial como en
Televisión Nacional de Chile para la señal abierta.
Y
los discursos de los mandatarios de la CELAC, dentro de la televisión
abierta, pasaron desapercibidos. Únicamente se podían ver por la señal
oficial, pasada solo por Internet, en la propia página del gobierno.
Desconocemos
la cobertura que se le dio a la cumbre CELAC-UE a nivel internacional,
pero es de suponer que no tuvo mucha repercusión dentro de los EEUU y
menos dentro de Europa –a nivel general–, a no ser que algunos países
tuvieran especial “interés” (ej España).
En
todo caso, no creemos que la corona española en sus tiempos “mozos”
haya informado mucho a sus ciudadanos de que una tropa de asesinos,
violadores, ladrones o delincuentes se habrían de dirigir a conquistar
“América” (¿“Expansión Económica?”) en beneficio de la corona.
Conclusión
La pasada cumbre de
la CELAC-UE es el intento de Europa por querer iniciar una nueva
ofensiva saqueadora dentro del continente, en conjunto con sus pares
domésticos, y fortalecer el marco ideológico del Neoliberalismo, que se
ha visto mermado en cierta medida y amenazado por la irrupción de
corrientes Anti-Neoliberales que abogan por la recuperación o mayor
control de los recursos naturales y por la recuperación o control de
sectores estratégicos tales como los servicios básicos, tragados por la
sed neoliberalista.
Los pueblos de
América Latina deberían saber que si el continente accede a los
propósitos de Europa, lo único que habrá de lograr será profundizar el
Modelo Neoliberal y retroceder los pequeños y últimos avances en cuanto
al ejercicio de la Democracia.
Europa apuesta por
mayor desigualdad dentro de América Latina. Y la forma como lo habrá de
vender a través de sus pares en el continente, será con una serie de
elementos de la misma forma como a los pueblos se les ha acostumbrado a
vender aquello de la“lucha contra la delincuencia”, “acabar con la
pobreza”, “acabar con el hambre”,“lucha contra las drogas”, “lucha
contra la corrupción”, etc.
¿Puede un
continente manchado con sangre iraquí, afgana, siria, libia, etc, como
el de Europa, venir a hablar a América Latina de “Desarrollo
Sustentable” y “Calidad social y ambiental”?
¿Puede un
continente manchado con sangre, venir a hablar a América Latina de una
relación más “equilibrada”, “eficiente”, “constructiva” y “simétrica”
con“complementariedad” –y esto es lo mejor– y “solidaridad entre las dos
regiones”?
¿Puede un
continente manchado con sangre, venir a hablar a América Latina de
“respeto a la integridad territorial” e “independencia política”?
¿Puede un continente manchado con sangre, venir a hablar a América Latina de “Derechos Humanos”?
¿Puede un
continente manchado con sangre, venir a hablar a América Latina de
“respeto a la legislación nacional e internacional”?
¿Puede un continente beneficiado por el modelo neoliberal, venir a hablar a América Latina de “evitar el proteccionismo”?
¿Puede un
continente acostumbrado a monopolizar el conocimiento, venir a hablar a
América Latina de “transferencia del conocimiento”?
¿Puede un
continente beneficiado por el modelo neoliberal, venir a hablar a
América Latina de “priorizar el desarrollo social, la salud y la
educación”?
¿Puede un
continente beneficiado por el modelo neoliberal, venir a hablar a
América Latina de “trabajar constantemente para erradicar la pobreza,
fomentar la igualdad, en particular la igualdad de género y la inclusión
social y para proteger a los grupos más vulnerables, incluyendo a los
pueblos indígenas y sus comunidades”?
¿Puede un
continente manchado con sangre, venir a hablar a América Latina de
“fomentar la cooperación para la paz y la solución pacífica de
controversias”?
¿Puede un
continente beneficiado por el modelo neoliberal, venir a hablar a
América Latina de “proteger y fomentar la seguridad de los trabajadores y
la salud”?
¿Puede un
continente beneficiado por el modelo neoliberal, venir a hablar a
América Latina de “lograr un crecimiento económico sostenido,
protegiendo al mismo tiempo el medio ambiente y promoviendo la inclusión
y la equidad social”?
¿Puede un
continente beneficiado por el modelo neoliberal, venir a hablar a
América Latina de la necesidad de “promover la armonía con la
naturaleza”?
Por favor…
Algunas fuentes consultadas: